Chocolate a la taza

El chocolate con churros al final de una tarde de procesiones es un rito casi obligado. Las virtudes energ¨¦ticas de este alimento lo convirtieron en un producto tan apreciado en el M¨¦xico precolombino, que las bayas de cacao se usaban como moneda. Fue el emperador azteca Moctezuma quien ofreci¨® al conquistador Hern¨¢n Cort¨¦s su primera taza de chocolate. A partir de 1503, empezaron a abrirse en Sevilla f¨¢bricas de chocolate a la espa?ola. En el siglo XVIII era un manjar para potentados, pero en el XIX lleg¨® a ser bebida habitual en los conventos. Hoy se venden muchos preparados para chocolate a la taza, pero aqu¨ª damos una f¨®rmula casera y sofisticada. Ingredientes: una tableta de chocolate fondant, 1 litro de leche, 2 cucharadas de maizena, 3 cucharadas de az¨²car, 2 vainas de vainilla rajadas a lo largo, un chorrito de ron. Preparaci¨®n: Se pone a hervir la leche con la vainilla, reservando una taza para desle¨ªr la maizena. Antes de que hierva se a?ade el ron y el chocolate en virutas. Se mueve sin parar con una cuchara de palo y cuando alcance el punto de ebullici¨®n, se vierte la leche con la maizena diluida y se a?ade el az¨²car. Se dan unas vueltas y se come mojando churros, picatostes o lo que se quiera.