Moncloa rechaza la propuesta socialista para privar al Senado de su condici¨®n de C¨¢mara legislativa
El Gobierno rechaza tajantemente la propuesta del PSOE, recogida en su Manifiesto Auton¨®mico, de convertir el Senado en una mera C¨¢mara de representaci¨®n territorial y constituida por miembros elegidos exclusivamente por los Ejecutivos de las comunidades aut¨®nomas. El secretario de Estado de Administraci¨®n Territorial, Francisco Camps, argument¨® ayer a EL PA?S que la propuesta socialista "rompe el amplio consenso alcanzado en la ponencia de reforma del Senado entre todos los partidos". El Gobierno se niega a que el Senado pierda su actual orientaci¨®n de C¨¢mara legislativa de segunda lectura y de control del Ejecutivo y a que sus miembros no sean elegidos directamente por las urnas. "Alejar¨ªa a¨²n m¨¢s al Senado de la calle", argumenta Camps.La propuesta de la Comisi¨®n Ejecutiva Federal del PSOE, conocida este fin de semana, de desaparici¨®n del Senado como C¨¢mara legislativa y su reconversi¨®n en C¨¢mara de representaci¨®n territorial, siguiendo el modelo del Bundesrat alem¨¢n, ha sorprendido al Gobierno. Sin embargo, el portavoz socialista del Senado, Juan Jos¨¦ Laborda, se?ala que esta propuesta, cuyo objetivo es el consenso, estaba recogida en la oferta auton¨®mica que el PSOE entreg¨® al Gobierno en marzo de 1998.
La diferencia de esta propuesta respecto a la de marzo de 1998 radica, seg¨²n explica Laborda, en que "los socialistas preve¨ªamos la constituci¨®n de una C¨¢mara formada por miembros elegidos por los Gobiernos aut¨®nomos como una segunda fase del proceso de reconversi¨®n del Senado" ya que "la primera ser¨ªa la elecci¨®n de sus miembros por los Parlamentos auton¨®micos". "Nuestro horizonte ha sido siempre la transformaci¨®n del Senado en C¨¢mara de representaci¨®n territorial", dice Laborda.
El portavoz socialista discrepa de que la propuesta de su partido suponga una ruptura del consenso de la ponencia de reforma del Senado ya que el ¨²nico acuerdo alcanzado en ella ha sido sobre las funciones del futuro Senado como C¨¢mara territorial. El desacuerdo persiste en la forma de elecci¨®n de los senadores -el PP sostiene la circunscripci¨®n provincial frente a las auton¨®mica del PSOE- y en el reconocimiento de los "hechos diferenciales" de las nacionalidades. "La ponencia de reforma del Senado no ha vuelto a reunirse desde junio de 1998", se?ala Laborda, que responsabiliza al PP de la ausencia de convocatorias.
Presi¨®n nacionalista
El portavoz socialista argumenta el "aceler¨®n" de la propuesta del PSOE por la precipitaci¨®n de los acontecimientos pol¨ªticos. "Resulta cada vez m¨¢s necesario y urgente hacer del Senado una C¨¢mara territorial que canalice todo el debate sobre la pol¨ªtica territorial en Espa?a as¨ª como los retos planteados por los nacionalistas". Laborda insiste en que el debate nacionalista se celebra en foros como el de Barcelona, Santiago o Bilbao, adem¨¢s de Estella, mientras la C¨¢mara que tiene vocaci¨®n de territorial permanece ajena.La Moncloa ha bloqueado el debate de la ponencia de reforma del Senado por razones de oportunidad pol¨ªtica. El ministro de Administraciones P¨²blicas, Angel Acebes, reconoci¨® en una reuni¨®n con la prensa, el pasado 3 de febrero, que, adem¨¢s de la complicaci¨®n pol¨ªtica que supone la reforma, no es procedente reabrir, en plena ofensiva pol¨ªtica nacionalista, el debate de una ponencia que conlleva una reforma constitucional.
Fuentes oficiosas del Gobierno han venido sosteniendo que razones de oportunidad desaconsejan precipitar la reforma del Senado. El Ejecutivo tiene los ojos puestos en una oferta global para neutralizar las pretensiones nacionalistas catalana y vasca, pero en una etapa m¨¢s avanzada, en todo caso posterior a las elecciones generales.
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