Valiente alegato
He esperado una semana entera antes de decidirme a escribir. Cada d¨ªa miraba la p¨¢gina de Opini¨®n a ver si uno de los intelectuales o juristas de este pa¨ªs, y me refiero aqu¨ª a los campeones de la defensa de los derechos humanos, se atrev¨ªa a contestar al valiente alegato de Javier Mar¨ªas acerca de la presunci¨®n de inocencia (EL PA?S, s¨¢bado 6 de marzo de 1999) para respaldarlo o rebatirlo. Nada, ni siquiera una carta, ni la m¨¢s m¨ªnima alusi¨®n a favor o en contra. ?Les habr¨¢ parecido demasiado peligroso el tema en esos tiempos tan pol¨ªticamente correctos o ser¨¢ que otras cuestiones m¨¢s medi¨¢ticas ocupan todo su preciado tiempo? ?ltimamente, en Francia y en Espa?a, varios hombres han sido condenados por pedofilia al cabo de unos juicios vergonzosos, sin pruebas, sin apenas instrucci¨®n. Conozco a uno de ellos, es un amigo. El tribunal de casaci¨®n acaba de rechazar su recurso, el ¨²ltimo que le ofrec¨ªa la famosa "justicia" de un pa¨ªs que se las da de ser el m¨¢s democr¨¢tico del mundo, Francia. No conozco a los dem¨¢s, pero me temo que su suerte est¨¢ echada. Est¨¢n pagando por unos cr¨ªmenes que no han cometido para que podamos dormir tranquilos. ?Poco importan unos cuantos errores judiciales si es ¨¦ste el precio de nuestra tranquilidad! La justicia es ciega, la justicia est¨¢ agobiada, la justicia no tiene tiempo ni medios como para atender semejantes minucias. Agradecido sea Javier Mar¨ªas por su tozudez, y ojal¨¢ otros tomen el relevo. Efectivamente, ya nadie est¨¢ a salvo.-
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.