El poblado de La Celsa ser¨¢ derribado, y sus 500 habitantes, realojados en pisos

VIENE DE LA P?GINA 1En el terreno que ahora ocupa la barriada, propiedad de la Comunidad, ¨¦sta construir¨¢ equipamientos educativos, aunque ayer el presidente regional rehus¨® concretar de qu¨¦ tipo.

El PSOE ve con buenos ojos el desmantelamiento de La Celsa, pero le pone pegas. El concejal y portavoz socialista en Puente de Vallecas, Rafael Merino, afirm¨® que las asociaciones vecinales no se oponen a los realojamientos, pero s¨ª a que se hagan sin "asistencia social". "No se les puede dar s¨®lo unos pisos a estas personas sin facilitarles el acceso a un trabajo digno y una cobertura social, as¨ª como educaci¨®n y asistencia sanitaria", a?adi¨®.

El concejal de IU Juli¨¢n Rebollo reclam¨® que, adem¨¢s de La Celsa y La Rosilla, tambi¨¦n se desmantele el poblado de realojamiento de Las Mimbreras, en Latina, lo que ser¨ªa responsabilidad del Ayuntamiento, no de la Comunidad. En este asentamiento viven 122 familias a tres kil¨®metros del vecindario m¨¢s cercano.

Por su parte, Prisciliano Castro, presidente de la Federaci¨®n de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM), calific¨® ayer como "una gran noticia" el anuncio del derribo de La Celsa. Record¨® que la FRAVM pidi¨® los desmantelamientos hace un a?o e insisti¨® en la necesidad de tomar medidas similares en los otros seis poblados de realojamiento similares de la capital.

"Es importante para la ciudad la desaparici¨®n de estos guetos, que se convierten en focos de tensi¨®n vecinal, venta de drogas y marginaci¨®n, por lo que hay que acabar con ellos de forma paulatina", se?al¨® Castro. Tambi¨¦n dijo que el derribo de La Celsa es un avance en la soluci¨®n de los problemas que generan estos poblados segregados destinados a alojar chabolistas.

El presidente de la asociaci¨®n de vecinos del Pozo del T¨ªo Raimundo, Agust¨ªn Zamora, mostr¨® tambi¨¦n su satisfacci¨®n. No obstante, pidi¨® que las declaraciones del presidente se concreten "en un compromiso con plazos y f¨®rmulas para hacer realidad la actuaci¨®n". A este dirigente vecinal le parece "l¨®gico" que Ruiz-Gallard¨®n aproveche el actual momento preelectoral para anunciar sus actuaciones. "Lo importante es que sus palabras se plasmen en hechos", reflexion¨®.

Ruiz-Gallard¨®n neg¨® ayer que esta operaci¨®n tenga fines electorales. Asegur¨® que se sent¨ªa "muy orgulloso" de la pol¨ªtica de realojos emprendida por su Gobierno y que el plan para La Celsa es s¨®lo uno m¨¢s.

Los poblados de realojamiento en casas bajas se concibieron como una alternativa para familias chabolistas que no quer¨ªan vivir en un bloque de pisos por costumbre o porque se dedicaban al chatarreo. Pero los planes para su construcci¨®n sufrieron sucesivos retrasos institucionales (por ejemplo, a los habitantes de La Celsa se les prometieron pisos para 1988) y la droga entr¨® en estos asentamientos.

A partir de ah¨ª se inici¨® un c¨ªrculo vicioso: la venta de droga generaba el rechazo vecinal a la construcci¨®n de nuevos campamentos, con lo que ¨¦stos acababan levant¨¢ndose en descampados. Y a mayor aislamiento, el barrio se convert¨ªa cada vez m¨¢s en un gueto. La consecuencia era que los planes de integraci¨®n se quedaban en v¨ªa muerta.

El presidente regional anunci¨® ayer, adem¨¢s, que invertir¨¢ 1.647 millones de pesetas en la rehabilitaci¨®n de un grupo de viviendas del Puente de Vallecas. Los residentes en estos pisos acusaban a las obras del metro de la l¨ªnea 1 de ser las causantes de las grietas. Sin embargo, Ruiz-Gallard¨®n rechaz¨® que los trabajos del metro sean los causantes de los desperfectos.