El aeropuerto de El Prat vive momentos de tensi¨®n tras la cancelaci¨®n de 49 vuelos
Miles de viajeros vivieron ayer como una verdadera pesadilla las horas pasadas en el aeropuerto de El Prat como consecuencia de la confusi¨®n creada por la cancelaci¨®n de 49 vuelos. Algunos pasajeros, como los de tres vuelos con destino a Valencia que deb¨ªan salir de Barcelona a las cuatro de la tarde, fueron finalmente trasladados en autocar a Tarragona, la ciudad m¨¢s cercana donde se encontraron hoteles disponibles. Muchos vuelos sufrieron retrasos de cinco y seis horas, y otros fueron simplemente cancelados. Otros viajeros prefirieron pasar la noche en los bancos del aeropuerto.
Los vuelos procedentes de Mil¨¢n y Lisboa que deb¨ªan aterrizar en El Prat entre las ocho y las nueve de la noche no lo hicieron hasta la una de la madrugada. Retrasos parecidos registraron los procedentes de Francfort y Asturias. Una de las situaciones m¨¢s tensas fue las vivida por los pasajeros del vuelo de Iberia 6185, con destino Buenos Aires, que ten¨ªa su salida a las 21.30 y no despeg¨® hasta las doce de la noche. Jos¨¦ N¨²?ez, que viajaba en ese avi¨®n, se puso en contacto con este peri¨®dico y explic¨® a su llegada a Madrid los momentos de tensi¨®n que se produjeron. "Nos llevaron al puente a¨¦reo y, ante las protestas efectuadas contra el piloto y la tripulaci¨®n, avisaron a la Guardia Civil. Los guardias nos chantajearon con la amenaza de que si no nos calm¨¢bamos el piloto no estaba en condiciones de volar. Al final cedimos, pero cuando llegamos a Madrid los pasajeros que deb¨ªan seguir viaje hacia Buenos Aires hab¨ªan perdido las conexiones".
Otro viajero comunic¨® a este diario que un vuelo procedente de Ankara con destino a Madrid y escala en Barcelona finaliz¨® su viaje en esta ciudad dejando a todos los viajeros en tierra. Al parecer, seg¨²n esta misma versi¨®n, que no se pudo confirmar, el avi¨®n no pudo seguir el viaje previsto debido a que la tripulaci¨®n agot¨® su jornada laboral. Los pasajeros de este vuelo tambi¨¦n vivieron momentos de tensi¨®n con el personal de la compa?¨ªa, que manifest¨® que no dispon¨ªa de una tripulaci¨®n de repuesto.
Tambi¨¦n sufrieron una situaci¨®n angustiosa los pasajeros de un vuelo procedente de Mil¨¢n con destino Madrid que ten¨ªa su salida de Barcelona a las cuatro de la tarde y que a las once de la noche no hab¨ªa salido. Los viajeros de otro vuelo con destino a Canarias que tambi¨¦n deb¨ªa salir a las cuatro no partieron hasta la medianoche.
Sin problemas de viento
Los problemas de retrasos y cancelaciones de vuelos, que vienen siendo la t¨®nica diaria del aeropuerto de El Prat en las ¨²ltimas semanas, registraron ayer uno de los d¨ªas m¨¢s graves. Pese a que las instalaciones aeroportuarias volvieron a su situaci¨®n ¨®ptima despu¨¦s de que el viento de la jornada anterior hiciera reducir la operatividad a la mitad, al final de la jornada el n¨²mero de vuelos cancelados fue de 49. Esta vez, la raz¨®n de los retrasos no estuvo en El Prat, de acuerdo con la versi¨®n facilitada por un portavoz del aeropuerto, ya que durante todo el d¨ªa estuvieron las dos pistas operativas, lo que permite alcanzar los 50 movimientos a la hora.
En esta ocasi¨®n, los problemas fueron provocados en buena medida por un condicionante externo: las restricciones en el espacio a¨¦reo europeo de Francia, Alemania y Suiza, una situaci¨®n que empez¨® en marzo y se mantendr¨¢ durante todo este mes y que provoca un tap¨®n que impide a los aviones despegar en el horario previsto. Sin embargo, a ¨²ltima hora otra fuentes apuntaban a la posibilidad de que los pilotos de Iberia pod¨ªan estar realizando una huelga de celo encubierta sin haberlo anunciado.
Hacia las siete de la tarde, el ¨ªndice de puntualidad de los aviones que aterrizaban en El Prat o despegaban desde sus pistas era del 48%, sensiblemente inferior al habitual. A esa misma hora, cuando ya se hab¨ªan producido 479 operaciones, el retraso medio era de 30 minutos.
Desde que d¨ªas antes de la semana de Pascua los pilotos de Iberia iniciaron sus jornadas de huelga, la normalidad en El Prat ha sido poco frecuente. Desde entonces han sido contadas las ocasiones en las que el aer¨®dromo barcelon¨¦s ha alcanzado su ¨ªndice de puntualidad habitual, situado entre el 70% y el 80%.
Los paros convocados por el SEPLA, la reordenaci¨®n del espacio a¨¦reo en diversos pa¨ªses de la Uni¨®n Europea y las restricciones en algunos pasillos a¨¦reos por motivos de seguridad a ra¨ªz del estallido del conflicto en los Balcanes han sido las principales razones de que los problemas en El Prat se hayan enquistado. Cuestiones meteorol¨®gicas como la niebla, algo inusual en el aeropuerto, o el viento han contribuido a mantener una situaci¨®n que los usuarios de El Prat observan con creciente desesperaci¨®n.
La situaci¨®n m¨¢s cr¨ªtica se produjo hace unos d¨ªas a consecuencia de la niebla, cuando ocho de cada diez operaciones se realizaron con retraso sobre el horario previsto. Parad¨®jicamente, el aeropuerto de El Prat aprob¨® la dif¨ªcil jornada del lunes de Pascua, cuando el masivo regreso de los catalanes de sus vacaciones, que coincidi¨® con una de las jornadas de huelga de los pilotos de la compa?¨ªa Iberia, hizo temer que el caos se apoderara del aeropuerto.
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