Mu?oz Molina afirma que el juicio moral est¨¢ mal visto

Jos¨¦ Manuel Fajardo, novelista y periodista, conoci¨® hace 14 a?os a su paisano el escritor Antonio Mu?oz Molina, que entonces ten¨ªa menos de 30 y era funcionario del Departamento de Cultura del Ayuntamiento de Granada. Como tal le ayud¨® a Fajardo a hacer un reportaje sobre la ciudad que acab¨® siendo una novela. Al final le confi¨®: "Acabo de publicar mi primera novela. Aqu¨ª te la dejo, por si te la lees". La novela result¨® ser Beatus Ille, que acababa de publicar Seix Barral. Fajardo la ley¨® de vuelta a Madrid y enseguida le envi¨® a Mu?oz Molina una carta que tambi¨¦n era "una petici¨®n de matrimonio literario". As¨ª, literalmente, lo cont¨® Fajardo ayer en una tertulia con la que la librer¨ªa Crisol present¨® el libro La huella de unas palabras (Espasa Calpe) que recoge una compilaci¨®n con la que Jos¨¦ Manuel Fajardo sella esa admiraci¨®n por la obra completa de Antonio Mu?oz Molina. ?ste dijo, en el curso de la conversaci¨®n p¨²blica, que, en efecto, su obra est¨¢ signada por la preocupaci¨®n moral y ¨¦tica, aunque ¨¦l es consciente de que "las evaluaciones morales [en Espa?a] son mal vistas". Fajardo situ¨® as¨ª su funci¨®n de ant¨®logo: "El Quijote lo escribieron los que lo han ido leyendo, y as¨ª ocurre con todos los libros que a uno le apasionan. Antes que escritores somos lectores". Y como lector, a partir de aquel conocimiento en Granada, se situ¨® ante la obra de Mu?oz Molina. Su libro es un di¨¢logo, y es tambi¨¦n una propuesta de di¨¢logo con otros lectores.

?tica republicana

Fajardo explic¨® su prop¨®sito intelectual y que siempre admir¨® la presencia de un actitud moral en Mu?oz Molina; una actitud que seg¨²n ¨¦l est¨¢ aparentada con la ¨¦tica republicano-democr¨¢tica y su sentimiento ha estado presidido por el dolor, la p¨¦rdida y la memoria. La lectura de Fajardo es, adem¨¢s, generacional, y su identificaci¨®n es la de un fan que muchas veces se halla por completo de acuerdo con los planteamientos c¨ªvicos, morales y literarios que en cierto modo se a¨²nan en la ¨²ltima novela del autor, Plenilunio (Alfaguara). La figura de Mu?oz Molina es, adem¨¢s, central en la nueva literatura espa?ola, que hall¨® sus puntos de inflexi¨®n en los a?os setenta con El caso Savolta, de Eduardo Mendoza, y en los ochenta, con Beatus Ille y El invierno en Lisboa. Mu?oz Molina agradeci¨® los cumplidos, pero asegur¨® que le horriza el primer plano. En cuanto a las reflexiones morales que sobre su actitud hizo Fajardo, el autor de Ardor guerrero acept¨® que ¨¦l prefiere hablar de las consecuencias de la guerra civil y no de la guerra de las galaxias, aunque consider¨® que en ese pa¨ªs el compromiso con las evaluaciones morales se halla mal visto; falta, adem¨¢s, un di¨¢logo intelectual que avive un debate que hace falta para superar el desd¨¦n que parece presidir toda discusi¨®n entre escritores. La libre circulaci¨®n de las ideas puede mejorar el clima, dijo Mu?oz Molina.