Identifican dos genes relacionados con el biorritmo

Investigadores de la Universidad Erasmo de Rotterdam, en colaboraci¨®n con un equipo de la Universidad japonesa de Sendai, han descubierto en ratones y en el hombre unos enzimas esenciales para el funcionamiento del biorritmo, el reloj biol¨®gico que funciona en periodos de 24 horas siguiendo el ciclo solar. Quienes realizan viajes largos de este a oeste sufren a menudo las molestias que provoca su perturbaci¨®n, que influye en la temperatura del cuerpo, los ciclos del sue?o, en el apetito y hasta en la actividad hormonal. La puesta en hora de ese reloj biol¨®gico depende de enzimas, de fotopigmentos y de receptores de luz. Seg¨²n el estudio, que ha sido publicado en la revista brit¨¢nica Nature, ambas prote¨ªnas, denominadas CRY1 y CRY2, son muy semejantes a las que regulan en las plantas los procesos de apertura y cierre de las flores, y en el hombre y los animales se encuentran tanto en el ojo como en el cerebro.

En las pruebas realizadas con ratones gen¨¦ticamente modificados a los que les faltaba alguna de estas prote¨ªnas, los investigadores comprobaron desarreglos del biorritmo. En condiciones normales, los animales se muestran activos durante la noche y duermen a lo largo del d¨ªa. Sin embargo, en los roedores que no ten¨ªan CRY1 se detect¨® que el reloj biol¨®gico les funcionaba m¨¢s deprisa y su d¨ªa duraba 22,5 horas en lugar de las 24 habituales.

Por el contrario, los roedores a los que faltaba la segunda prote¨ªna, el d¨ªa biol¨®gico se les prolongaba hasta una hora m¨¢s y los animales desprovistos de las dos, que fueron sometidos a una oscuridad constante, perdieron todo sentido del ritmo y eran incapaces de distinguir entre el d¨ªa y la noche.