Nuevo fracaso en la reanudaci¨®n de las negociaciones sobre la paz en el Ulster
El cambio del escenario de las negociaciones, de Belfast a Londres, surti¨® el m¨ªnimo efecto en la disposici¨®n de sus protagonistas a superar los obst¨¢culos pendientes. El proceso irland¨¦s sigue estancado en el cap¨ªtulo del decomiso de las armas paramilitares y, seg¨²n el Sinn Fein, la rama militar del Ej¨¦rcito Republicano Irland¨¦s (IRA), el Acuerdo del Viernes Santo de 1998 ha entrado en "una ca¨ªda libre". "Nada se ha resuelto y los problemas se mantienen", se?al¨® ayer el presidente del partido, Mitchel McLaughlin.
A pesar del nuevo fracaso, los promotores de las negociaciones, los primeros ministros del Reino Unido, Tony Blair, e Irlanda, Bertie Ahern, se resisten a dar marcha atr¨¢s en el camino labrado. Por ello, tras anunciar una nueva ronda de encuentros bilaterales, que, como ayer, se celebrar¨¢ la semana pr¨®xima en Londres, el jefe del gobierno irland¨¦s se?al¨® con optimismo que "nadie quiere que se paralice el Acuerdo". "Queremos que los partidos nos ayuden a resolver la situaci¨®n. Nadie va a ganarlo todo y nadie va a perderlo todo", defendi¨® Ahern frente a la residencia oficial del primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, en Downing Street. El progreso en la aplicaci¨®n del Acuerdo de 1998 depende de dos partidos: el partido unionista moderado UUP de David Trimble y el frente pol¨ªtico del IRA, el Sinn Fein de Gerry Adams. Los unionistas se niegan a compartir el autogobierno con los republicanos hasta que su organizaci¨®n armada proceda al desarme. "Nos est¨¢n chantajeando", dijo el nacionalista moderado Seamus Mallon visiblemente enfadado. "No podemos permitir que un tema como el desarme destruya el proceso pol¨ªtico". Su colega de formaci¨®n y principal impulsor del proceso de paz, John Hume, resalt¨® por su parte el "deber" de los firmantes del Acuerdo de "llevar a la pr¨¢ctica el deseo mayoritario de la poblaci¨®n norirlandesa". "El suspense se debe a dos interpretaciones diversas sobre un peque?o detalle del Acuerdo", se?al¨® tras entrevistarse con Blair y Ahern.
Ambos primeros ministros reconocen el fracaso de su ¨²ltima propuesta para un posible compromiso: la nominaci¨®n de los ministros de Irlanda del Norte y el traspaso de competencias coincidiendo con un "acto de reconciliaci¨®n" en que algunas armas ilegales se podr¨¢n "fuera de uso" y se acelerar¨¢ la desmilitarizaci¨®n de la regi¨®n.
Con la propuesta rechazada por el Sinn Fein, Tony Blair y Bertie Ahern piden expl¨ªcitamente a la formaci¨®n republicana y al l¨ªder unionista que tracen el camino hacia un avance en el proceso de paz. "Deben contribuir al desarrollo de una soluci¨®n", se?al¨® Ahern, invitando a ambos partidos a sumarse al protagonismo que Londres y Dubl¨ªn tienen desde el inicio de las conversaciones, hace ya m¨¢s de cuatro a?os.
"Hay espacio para la negociaci¨®n y no ayuda mucho sugerir que el Acuerdo no vale y que est¨¢ a punto de colapsarse", defendi¨® por su parte David Trimble. El dirigente unionista no aport¨® ayer ning¨²n detalle sobre el posible compromiso que apuntale, a la vez, el pilar sobre el que est¨¢ construido el actual proceso de paz en el Ulster: la inclusi¨®n de todos los principales partidos de Irlanda del Norte, incluido el Sinn Fein, en las instituciones acordadas en abril de 1998.
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