Enresa comienza a desmantelar el complejo radiactivo de la central de Vandell¨°s I

La Empresa Nacional de Residuos (Enresa) ha iniciado la segunda fase del desmantelamiento de la central nuclear de Vandell¨°s I, en Tarragona, con los primeros trabajos en las zonas contaminadas, en concreto en el edificio del reactor. Los trabajos comenzaron el d¨ªa 7 y culminar¨¢n en el 2002 con la demolici¨®n del 80% de las instalaciones y la preparaci¨®n del nuevo revestimiento del reactor para su periodo de latencia, de 30 a?os, requerido para que los niveles de actividad del n¨²cleo desciendan hasta permitir su destrucci¨®n. El coste de esta segunda fase es de 14.800 millones de pesetas.

La segunda fase del plan dise?ado por Enresa y aprobado por el Consejo de Seguridad Nuclear comprende la intervenci¨®n tanto en partes radiol¨®gicas como en las convencionales o no contaminadas. Los residuos de las primeras, unas 2.000 toneladas, se destinar¨¢n al almac¨¦n de El Cabril (C¨®rdoba), mientras que los convencionales (chatarras o productos t¨®xicos, como aceites industriales o mercurio) ir¨¢n a vertederos autorizados. Las partes activas o contaminadas son la nave del reactor, el edificio de las piscinas o los silos de grafito, mientras que las convencionales son los edificios auxiliares el¨¦ctricos, la estaci¨®n de bombeo o la zona de tratamiento de efluentes (litios). Seg¨²n el director de la central, Jos¨¦ Ram¨®n Armada, Enresa ha iniciado ya los trabajos en el edificio del reactor, en el que tambi¨¦n se controla el acceso del personal y los controles radiol¨®gicos. Asimismo, se han se?alizado las rutas de evacuaci¨®n en caso de emergencia y ha comenzado la retirada de productos t¨®xicos como aceites o mercurio.

Se est¨¢ procediendo a la sustracci¨®n de los aislantes de las tuber¨ªas que acceden al caj¨®n del reactor para posteriormente cortarlas, sellarlas y aislar el n¨²cleo. La empresa p¨²blica titular de la central ultima ahora el taller de corte, donde se preparan los materiales para su posterior expedici¨®n en cajones, as¨ª como el muro de blindaje que separar¨¢ las zonas de acondicionamiento de los residuos radiactivos de los no contaminados.

De forma paralela a la actuaci¨®n en el edificio del reactor, se proceder¨¢ al desmantelamiento del de las piscinas, en el que se guardaba el combustible nuclear, y del edificio de los silos de grafito (cuyo fin est¨¢ previsto para el a?o 2001), al igual que el resto de bloques convencionales. Una vez finalizado este proceso, el caj¨®n del reactor quedar¨¢ aislado (a mediados del a?o 2002) y en su interior se realizar¨¢n diferentes pruebas de cara a garantizar su estanqueidad. El Consejo de Seguridad Nuclear ha exigido asimismo la realizaci¨®n de mediciones en el n¨²cleo del reactor para comprobar su actividad.

El caj¨®n del reactor o revestimiento de hormig¨®n, de forma hexagonal, permitir¨¢ que aqu¨¦l permanezca durante 30 a?os en latencia para que sus niveles de radiactividad disminuyan hasta un 5% y permitan su desmantelamiento. Esta tercera fase ser¨¢ la m¨¢s cara (se calcula que unos 35.000 millones) y la m¨¢s dif¨ªcil de precisar, por su lejan¨ªa en el tiempo y porque no se sabe exactamente qu¨¦ t¨¦cnicas se emplear¨¢n.