Las opciones de la intervenci¨®n terrestre

Los mandos militares de la OTAN tienen listas, desde el pasado verano, tres opciones de intervenci¨®n terrestre en Kosovo.

Tregua con acuerdo formal. Para aplicar un alto el fuego tras un acuerdo de paz con Belgrado ser¨ªa necesaria una fuerza integrada por 26.000 soldados. Este contingente contar¨ªa con efectivos de pa¨ªses que no son miembros de la Alianza, como Rusia. La direcci¨®n pol¨ªtica corresponder¨ªa al Consejo Atl¨¢ntico, mientras la direcci¨®n militar recaer¨ªa sobre el comandante supremo aliado en Europa, el general estadounidense Wesley Clark. La vanguardia de esta fuerza, unos 12.000 hombres que ya se encuentran estacionados en Macedonia, podr¨ªa penetrar en Kosovo en pocas horas.

Limitada o nula resistencia serbia sin acuerdo formal. A partir de la aceptaci¨®n de un cese de las hostilidades por parte de las autoridades yugoslavas se abre la arriesgada opci¨®n de un despliegue de entre 60.000 y 80.000 soldados de la OTAN, apoyados por carros de combate y artiller¨ªa, sin que parezca probable que otros pa¨ªses est¨¦n dispuestos a participar en la operaci¨®n. El n¨²mero de hombres necesario depender¨ªa de la resistencia que puedan oponer las fuerzas serbias. La avanzadilla de Macedonia ser¨ªa claramente insuficiente para desencadenar este plan de intervenci¨®n terrestre en Kosovo.

Sin tregua ni acuerdo. La siguiente etapa de la guerra tras la batalla a¨¦rea involucrar¨ªa hasta a 200.000 soldados aliados en un peligroso escenario sin alto el fuego ni acuerdo de paz. La misi¨®n de la mayor fuerza militar desplegada en Europa desde el fin de la II Guerra Mundial tendr¨ªa como principal objetivo la ocupaci¨®n de Kosovo y el control de su frontera con Serbia. Tanto Grecia como Macedonia se oponen a ceder su territorio para esta operaci¨®n, que dif¨ªcilmente podr¨ªa lanzarse desde el monta?oso norte de Albania. Queda la posibilidad de atravesar Montenegro, tal vez Bulgaria, en una opci¨®n en la que ser¨ªa muy dif¨ªcil limitar las bajas aliadas.