s Interior asegura que tiene grabaciones de acciones irregulares de "ertzainas" en el barrio chino bilba¨ªno

El viceconsejero de Interior, Mikel Legarda, comunic¨® el mi¨¦rcoles a una delegaci¨®n del sindicato mayoritario de la Ertzaintza, Erne, que el departamento tiene v¨ªdeos en los que aparecen ertzainas "cometiendo irregularidades en el barrio chino de Bilbao que sobrepasan las sanciones meramente administrativas y entran en el cap¨ªtulo de lo delictivo". Interior confirm¨® ayer que hay en marcha una "investigaci¨®n criminal concreta", pero evit¨® dar detalles. El Ararteko acus¨® recientemente a la Ertzaintza de realizar actuaciones en esa zona que vulneran los derechos fundamentales.

El robo la semana pasada de un equipo de un dispositivo de videovigilancia colocado por la Ertzaintza en una casa del barrio chino de la capital vizca¨ªna ha destapado pruebas de supuestos excesos de varios ertzainas destinados en la zona. Legarda transmiti¨® esta informaci¨®n a dos responsables del sindicato mayoritario de la polic¨ªa vasca, Erne, (I?aki Castro y Joseba Bilbao) en una reuni¨®n celebrada el mi¨¦rcoles en su despacho del Gobierno vasco. El n¨²mero dos de Interior explic¨® a ambos sindicalistas que las grabaciones muestran actuaciones irregulares de agentes sobre personas de raza blanca, aunque evit¨® concretar los delitos que supuestamente han cometido los polic¨ªas. El operativo policial, iniciado a fines del a?o pasado y que sigue en marcha, incluye c¨¢maras no s¨®lo en el piso reventado por unos ladrones, sito en la calle Las Cortes. Los delincuentes sustrajeron de ese inmueble dos magnetoscopios. Fuentes policiales aseguran que al menos una de las c¨¢maras situadas en el piso ten¨ªa como objetivo grabar todo lo relacionado con los agentes de la furgoneta que habitualmente est¨¢ aparcada en la calle Cantera del barrio de Bilbao La Vieja. En esta zona es habitual la presencia de narcotraficantes. Sin avisar a los ciudadanos El dispositivo policial incluye m¨¢s c¨¢maras en la zona, aunque en ning¨²n momento se ha colocado ning¨²n tipo de advertencia para los ciudadanos. El art¨ªculo 22 del cap¨ªtulo V (Derechos de los Ciudadanos) del reglamento sobre la utilizaci¨®n de videoc¨¢maras por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en lugares p¨²blicos -que ha entrado en vigor este mismo lunes tras su publicaci¨®n en el Bolet¨ªn Oficial del Estado- se?ala que "para informar al p¨²blico de la existencia de instalaciones fijas de videoc¨¢maras se utilizar¨¢ una placa informativa, en la que figurar¨¢ el pictograma de una c¨¢mara de v¨ªdeo, y un panel complementario" con una "descripci¨®n gen¨¦rica de la zona de vigilancia y de las autoridades responsables de la autorizaci¨®n y custodia de las grabaciones". Preguntados sobre este extremo, portavoces del Departamento de Interior indicaron que la investigaci¨®n en el barrio chino de Bilbao "no se encuadra dentro de las grabaciones a las que se refiere ese decreto. Adem¨¢s, en el Pa¨ªs Vasco tenemos nuestra propia reglamentaci¨®n en materia de videovigilancia por lo que no tendr¨ªamos que aplicar la ley aprobada en el Congreso de los Diputados". La consejer¨ªa de Interior aprob¨® el pasado 15 de julio, cuando todav¨ªa era su titular Juan Mar¨ªa Atutxa, el decreto que desarrolla el r¨¦gimen de autorizaci¨®n y empleo de videoc¨¢maras por la polic¨ªa vasca en lugares p¨²blicos, regulado en la ley org¨¢nica del 4 de agosto de 1997. Su art¨ªculo 8 indica que "se informar¨¢ al p¨²blico de manera clara y permanente de la existencia de videoc¨¢maras fijas, sin especificar su emplazamiento, as¨ª como de la autoridad competente". La autorizaci¨®n para colocar las c¨¢maras corresponde a la Comisi¨®n de Videovigilancia, que preside Manuel Mar¨ªa Zorrilla, presidente del Tribunal Superior vasco. El informe del Ararteko correspondiente al a?o pasado, que el titular de la instituci¨®n, Xabier Markiegi, present¨® en el Parlamento el pasado 25 de marzo, se?ala que las actuaciones de la Ertzaintza y la Polic¨ªa Municipal de la capital vizca¨ªna con los inmigrantes en Bilbao la Vieja (donde se encuentra el barrio chino) han vulnerado derechos fundamentales. Las irregularidades m¨¢s importantes detalladas por el Ararteko fueron la violencia en el momento de abordar a las personas para su mera indentificaci¨®n (por ejemplo colocando la porra en la garganta), los registros, a veces con la conminaci¨®n a desnudarse total o parcialmente en la calle, los insultos (en ocasiones con contenidos racistas o xen¨®fobos) y las amenazas.