Consumo y caladeros

Con una demanda de unos 40 kilos por persona y a?o, Espa?a es uno de los pa¨ªses con mayor consumo de pescado. Los esa?oles tiene afici¨®n por los productos de la pesca y, adem¨¢s, la pagan bien. Seg¨²n el p¨¢nel de consumo alimentario de 1998, de cada 100 pesetas que se gastan en los hogares en alimentaci¨®n, el 12,6%, casi 20.000 pesetas, se destinan a los productos pesqueros. Concretamente, en 1998, aunque el precio subi¨® una media del 4%,la demanda lo hizo en un 6%. Este gran inter¨¦s de los espa?oles por el pescado ha provocado dos fen¨®menos. Primeroque la flota espa?ola haya teniodo que acudir hist¨®ricamente a realisar capturas en cualquier parte del mundo. Segundo, que en este momento, los principales pa¨ªses productores de pescad, quienes disponen delos mejores caladeros, tengan su mirada puesta en Espa?a para colocar aqu¨ª directamente sus materias primas poniendo dificultades para que faenen la flotas espa?olas en sus aguas.

Seg¨²n datos del comecio exterior, en 1997 Espa?a import¨® 1,2 millones de toneladas de pesca valoradas en casi medio bill¨®n de pesetas. De esa cantidad, 130.000 toneladas proced¨ªan de Argentina, 82.000 toneladas de Marruecos, 58.000 toneldas de Namibia y 45.000 toneladas de Chile.

En el espacio de la Uni¨®n Europea, la situaci¨®n es similar.Las principales importaciones se hacen desde Francia con 91.000 toneladas seguidas de las 61.000 toneladas del Reino Unido y 49.000 toneladas de Portugal. Curiosamente, todos esos pa¨ªses, han establecido mecanismos para que sea su propia flota y no la espa?ola quien realice las capturas en sus aguas de cara a su venta en el mercado espa?ol.