El Valencia se asoma a Europa

El Valencia logr¨® lo que quer¨ªa. Una victoria que consolidara sus aspiraciones a jugar la pr¨®xima temporada la Liga de Campeones. Y lo consigui¨® con un juego gris, sin estridencias, donde el Piojo L¨®pez no supo brillar como ¨¦l suele hacer de forma habitual. Frente a ello, el Salamanca se desesper¨® un poco m¨¢s en su debilidad y no pudo conseguir una victoria que le acercara a la promoci¨®n. Fue, una vez m¨¢s, un equipo que ni pudo ni supo hacer un gol al contrario. Desesper¨® a su entrenador y hasta a la afici¨®n, que ya no sab¨ªa si pitar o aplaudir.El partido comenz¨® como suele hacerlo el Salamanca. Intento de presi¨®n en el centro del campo y nulidad en la delantera. As¨ª est¨¢ en la posici¨®n que se encuentra, el ¨²ltimo de la tabla de clasificaci¨®n de la Primera Divisi¨®n. Hizo oportunidades, pero ni Taira, en el minuto dos, ni Casartelli o Cardetti, lograron meter el gol que tanto desean. Sin embargo, el Valencia hizo lo que sabe. Una oportunidad, un gol. No fue en esta ocasi¨®n el Piojo L¨®pez, que a lo largo del partido estuvo gris. Fue Vlaovic, a pase de Juan Fran, quien en el minuto 23, y tras un despiste -otro m¨¢s- de la defensa salmantina, el que logr¨® el ¨²nico gol del partido.

A partir de ese momento, el Valencia fue m¨¢s equipo. Aceler¨® cuando quiso, presion¨® cuando le apeteci¨® y control¨® lo todo lo que dese¨®.

El Salamanca sigui¨® en su t¨®nica. Control en el medio, nervioso en la defensa e inoperante en la delantera. El ¨²nico que llevaba peligro era Mart¨ªn Vellisca por la banda izquierda. Junto a ¨¦l, Giovanella y Taira intentaron controlar el medio, sin conseguirlo con rotundidad.

La segunda parte fue m¨¢s de lo mismo. El Valencia empez¨® con una presi¨®n a la defensa salmantina. Mendieta comenz¨® a funcionar y el equipo valenciano se lo agradeci¨®. Por su parte, el Salamanca fue m¨¢s inoperante si cabe. Llegaba al ¨¢rea contraria, pero los delanteros no sab¨ªan encontrar el gol de la victoria. Lo intent¨®, pero no lo consigui¨®.

La segunda parte s¨®lo cont¨® con el atractivo negativo del ¨¢rbitro Jap¨®n Sevilla que no pit¨® faltas claras -para uno y otro equipo-, penaliz¨® las inexistentes y, al final, tuvo que salir escoltado por la polic¨ªa. Los nervios del Salamanca ya estaban a flor de piel en esos momentos. El Lobo Diarte, entrenador del Salamaca, explot¨® y fue expulsado.

Fue el final de un partido anodino, sin chispa, controlado en todo momento por el Valencia y con un juego desesperante del Salamanca que sigue sin encontrar soluciones a sus problemas y a su situaci¨®n en la tabla.

Ni con Ortuondo, ni con Diarte. El equipo charro se encamina con todo merecimiento hacia Segunda Divisi¨®n.