Aprender del fuego

"?Socorro! ?Socorro! ?Bomberos! ?Auxilio!". Es el grito chill¨®n de una mujer en apuros. No deja de gritar. Sale un humo espeso y gris oscuro de la puerta. No se ve nada y se respira con dificultad. Ella est¨¢ sentada en el suelo con un chandal rojo. La situaci¨®n es tensa y arriesgada, pero no es real. Se trata de un simulacro. El humo no es t¨®xico ni contaminante, la mujer es una mu?eca de tama?o natural, sus gritos proceden de una grabaci¨®n y su vivienda no es m¨¢s que un contenedor preparado para producir los humos y las llamas. Todo sucede durante una demostraci¨®n en la inauguraci¨®n, ayer, del primer parque de maniobras para bomberos que se habilita en el Pa¨ªs Vasco. Est¨¢ situado en el municipio vizca¨ªno de Ispaster. El parque es una plataforma de hormig¨®n de unos 4.650 metros cuadrados, rodeada de una valla met¨¢lica, en la que se alojan diferentes equipamientos. Seis bomberos del cercano parque de Markina son los encargados de realizar las demostraciones con las que se da por abiertas las instalaciones. Para las simulaciones con fuego se utiliza gas propano. "En las fugas de gas lo prioritario es llegar hasta la llave y cerrarla. Lo m¨¢s peligroso de los sitios cerrados es el humo. Siempre entramos con equipo respiratorio en esos casos", explica uno de los bomberos. El nuevo parque de maniobras est¨¢ dedicado a la formaci¨®n tanto de los propios bomberos como de personal no profesional. "Todos tenemos que reciclarnos. Aparecen nuevas t¨¦cnica, nuevas t¨¢cticas para luchar contra el fuego. Tambi¨¦n es importante no perder la pr¨¢ctica, aunque nosotros se puede decir que no la perdemos nunca", comentan estos profesionales. All¨ª se impartir¨¢n cursos de nociones b¨¢sicas en materia de prevenci¨®n y extinci¨®n de incendios a no profesionales y cursos de pr¨¢cticas y entrenamiento para los bomberos. Las instalaciones de Ispaster han costado 85 millones de pesetas (511.000 euros), de los que m¨¢s de la mitad se han empleado en obra civil y el resto en equipamiento. El parque est¨¢ dividido en diferentes secciones. Nada m¨¢s entrar en el recinto se levanta una casita de madera (acorde con el entorno de bosques, que aseguran que no peligra en ning¨²n caso) donde se imparte la formaci¨®n te¨®rica. Tiene capacidad para 25 alumnos. Detr¨¢s del aula se distribuyen los aseos y los vestuarios. A un lado se encuentra el garaje para el coche de bomberos y los almacenes de material. El primer m¨®dulo est¨¢ formado por tres contenedores, en dos alturas diferentes. En ellos se simulan fuegos interiores y rescates. El segundo m¨®dulo se destina a la simulaci¨®n de tres tipos de fuegos de gases. Los seis bomberos presentes ayer apagaron en ¨¦l un fuego que surg¨ªa de una estructura semejante a un ¨¢rbol. El tercer m¨®dulo lo compone una unidad m¨®vil de entrenamiento con una galer¨ªa de humos y elementos para pruebas de esfuerzo. Esta unidad est¨¢ monitorizada con c¨¢maras de infrarrojos para poder socorrer a los participantes en las pruebas en caso de accidente.