Tres antimilitaristas que atacaron un cuartel s¨®lo quer¨ªan "armar revuelo"

"Armar revuelo" y "montar algo de espect¨¢culo" para protestar contra los fundamentos de la sociedad burguesa y capitalista le puede costar hasta 12 a?os de prisi¨®n a tres j¨®venes que, el 18 de julio de 1996, aprovechando el aniversario del alzamiento contra la rep¨²blica, arrojaron tres "c¨®cteles molotov" contra un cuartel del ej¨¦rcito en Valencia. El fiscal les acusa de un delito de estragos.

Los acusados, tres varones de creencias libertarias y pacifistas que no militaban en ning¨²n colectivo organizado, elaboraron los artefactos explosivos con la intenci¨®n de arrojarlos contra una cafeter¨ªa de lujo -s¨ªmbolo de la burgues¨ªa-, un templo -encarnaci¨®n f¨ªsica de la iglesia- o un acuartelamiento, representaci¨®n del ej¨¦rcito. Pero nunca tuvieron la intenci¨®n "de causar da?os personales o materiales", seg¨²n declararon ayer en el juicio celebrado contra ellos en la Audiencia de Valencia. Es m¨¢s, aunque ten¨ªan la intenci¨®n de reivindicar su "acci¨®n" bajo el nombre inventado de alguna organizaci¨®n radical, su ¨²nico objetivo era llamar la atenci¨®n: "S¨®lo quer¨ªamos que saliera en el peri¨®dico", dijeron. De hecho, desistieron de diversificar sus objetivos para, hacia las 4.15 horas, lanzar los c¨®cteles molotov contra el cuartel del ej¨¦rcito en el Paseo de la Alameda de Valencia. "Lo elegimos porque desde fuera, a trav¨¦s de la valla, vimos que hab¨ªa una explanada desierta". Los artefactos ¨²nicamente da?aron un ¨¢rbol, ya regenerado, aunque podr¨ªan haber provocado la explosici¨®n de la gasolinera ubicada en el recinto castrense de no mediar la r¨¢pida reacci¨®n de dos soldados, que sofocaron en unos segundos el peque?o incendio ocasionado. Por ello, la fiscal¨ªa solicit¨® para los tres acusados, Javier R. V.; Rafael T. G. y Jaime N. G., penas que oscilan entre los ocho y los 12 a?os de prisi¨®n. El ministerio p¨²blico les imputa un delito de estragos en grado de tentativa. Id¨¦ntica petici¨®n realiz¨® al final de la vista el abogado del estado. Ambos solicitaron al tribunal, en caso de que los magistrados entiendan que ese delito no fue cometido, tres a?os de prisi¨®n por tenencia de explosivos, aunque entienden que la intenci¨®n del ataque fue "destruir el acuartelamiento". Los abogados de la defensa solicitaron la absoluci¨®n de los procesados, tres j¨®venes que por aquel entonces frecuentaban el kasal popular, una casa rehabilitada en la que j¨®venes okupas, antimilitaristas o ecologistas realizaban actitividades culturales de todo tipo. Esa era la ¨²nica filiaci¨®n de los acusados, que fueron conducidos hasta la Audiencia Nacional por la polic¨ªa ante la posibilidad de que formaran parte de alguna organizaci¨®n terrorista. La hip¨®tesis fue descartada y, ayer, los acusados volvieron a insistir en la inocencia e improvisaci¨®n de su acto. ?nicamente pretend¨ªan "llamar la atenci¨®n sin hacer da?o a nadie", asegur¨® Javier R. V.. Aquel d¨ªa, el 18 de julio, "por lo poco que s¨¦ de historia, sab¨ªa que 60 a?os antes el Ej¨¦rcito hab¨ªa cometido asesinatos", declar¨®.