El milagro de los panes y peces

En los 20 a?os de historia democr¨¢tica de Roquetas de Mar (Almer¨ªa) jam¨¢s ha existido un gobierno con mayor¨ªa absoluta. En este tiempo, incluso, ha habido distintas coaliciones entre partidos o acuerdos puntuales entre Partido Popular, PSOE, IU y UP (Uni¨®n del Pueblo) para gestionar la vida del municipio. En los ¨²ltimos comicios el PP fue el m¨¢s votado y Gabriel Amat se situ¨® al frente de la corporaci¨®n municipal para gobernar en solitario. "El coeficiente de apoyo por unanimidad en los plenos durante estos cuatro a?os ha sido del 92%", comenta satisfecho Amat. Esa pluralidad de fuerzas representadas en el Consistorio tiene su reflejo, tambi¨¦n plural, en las v¨ªas de subsistencia del municipio costero y en los n¨²cleos de poblaci¨®n que componen su censo. A tan s¨®lo 20 kil¨®metros de la capital almeriense, Roquetas de Mar aglutina el 70% del turismo de toda la provincia, con unas 25.000 camas repartidas en modernos complejos hoteleros que han dotado al municipio de atractivos siempre desde la iniciativa privada. El ejemplo m¨¢s reciente lo constituye el parque acu¨¢tico de pr¨®xima apertura, con 50 puestos de trabajo directos y 60.000 metros de superficie que le convertir¨¢n en uno de los m¨¢s grandes de Espa?a. Empe?os del alcalde Amat por proyectar la imagen del pueblo m¨¢s all¨¢ de las fronteras provinciales motivaron la celebraci¨®n, en febrero del 98, de la final del concurso de misses con una aportaci¨®n empresarial no poco generosa."Cre¨ªa que era importante retransmitir parte de la buena provincia que tenemos. Aquello cost¨® 70 millones pero el Ayuntamiento s¨®lo gast¨® 10", explica el alcalde. Al turismo de cuerpos ¨¢vidos de mar y rayos solares, Roquetas de Mar ha sabido unirle la opci¨®n reflexiva y de debate acad¨¦mico al convertirse en sede del 90% de los congresos celebrados en la provincia. Sin embargo, el foro acad¨¦mico de mayor prestigio lo constituyen los cursos de verano que cada a?o la Universidad Complutense celebra en Aguadulce, ciudad sat¨¦lite de Roquetas no exenta de corrientes separatistas por la "escasa" gesti¨®n municipal, a juicio de los vecinos del Ayuntamiento roquetero en la zona. Y es que el problema de la poblaci¨®n flotante supone para las arcas municipales unas p¨¦rdidas constantes de dinero estatal. La cifra de casi 45.000 ciudadanos empadronados se transforma en los meses de est¨ªo hasta los 120.000, que eligen Roquetas como destino tur¨ªstico o como segundo lugar de residencia. El otro motor econ¨®mico, el de la agricultura intensiva, sit¨²a al municipio en competencia directa con los pueblos de El Ejido, V¨ªcar o La Mojonera, y lo iguala en sus problemas: Roquetas cuenta con la mano de obra de 3.000 inmigrantes norteafricanos documentados; pero se calcula esa misma cifra o superior para los que carecen de papeles. Salvo la tradici¨®n pesquera del municipio originario, que no contaba con m¨¢s de 3.000 habitantes hace tan s¨®lo tres d¨¦cadas, la diseminaci¨®n de barriadas y anejos como El Parador, Las Marinas, Cortijo Mar¨ªn, Solanillo o La Gloria, hacen converger al municipio en la com¨²n historia del Poniente almeriense: poblaciones surgidas como improvisadas ciudades para acoger los flujos migratorios y la imprescindible mano de obra. Junto a esa mezcolanza de ciudad empresaria, tanto agr¨ªcola como tur¨ªstica; ciudad dormitorio, identificada en Aguadulce, que comienza a ser el lugar de residencia elegido por j¨®venes generaciones sin posibilidad de acceder a una vivienda en la capital; existe tambi¨¦n una ciudad m¨¢s ex¨®tica o cosmopolita asentada en la urbanizaci¨®n, la parte m¨¢s moderna, e integrada por un n¨²cleo de 400 extranjeros (alemanes e ingleses, fundamentalmente) venidos hace 40 a?os en busca de sol para la senectud. Entre los proyectos m¨¢s ambiciosos que sirvan para articular los distintos n¨²cleos poblacionales sobresalen el embellecimiento de la N-340 que una Aguadulce con el Parador; un enlace directo al que aspira la corporaci¨®n, entre la autov¨ªa con la urbanizaci¨®n roquetera; y la uni¨®n costera, a trav¨¦s de un paseo, entre Aguadulce y Roquetas. Varias empresas han solicitado al Ayuntamiento la puesta en marcha de una gran superficie comercial que confirma, seg¨²n el alcalde, "lo apetitoso que resulta el municipio por su estabilidad econ¨®mica y de permanente desarrollo".