Matthaus deber¨¢ seguir un a?o m¨¢s con su maldici¨®n

No le quedar¨¢ otro remedio a Lothar Matthaus que continuar otra temporada para mantener su sue?o de ganar el ¨²nico t¨ªtulo que falta en su curr¨ªculo: la Copa de Europa. Pese a que le queda un a?o de contrato, pod¨ªa haberse planteado la jubilaci¨®n este verano si ayer hubiera salido ganador del Camp Nou. Pero Matthaus y el Bayern fueron v¨ªctimas de la maldici¨®n que pesa sobre el campe¨®n alem¨¢n desde que logr¨® su tercer y ¨²ltimo t¨ªtulo (1974, 1975 y 1976) frente al Saint Etienne, en el Hampden Park de Glasgow, fatalidad que contrasta hoy con la suerte que tuvo aquel 15 de mayo de 1974 en Bruselas, cuando un gol de Schwarzenbeck en el ¨²ltimo minuto de la pr¨®rroga frustr¨® el sue?o del Atl¨¦tico de Madrid y forz¨® un partido de desempate sin color.Hace 17 a?os, otro 26 de mayo, perdi¨® el trofeo en el estadio De Kuip, en Rotterdam, ante el Aston Villa, al que le vali¨® un gol de White. Y en la edici¨®n de 1987, en el Prater de Viena, el Oporto le remont¨® un gol en una final presidida por aquel tanto de tac¨®n de Madjer y el posterior de Juary.

Cumplidos ya los 38 a?os, a Matthaus s¨®lo le quedar¨¢ el consuelo de haber dejado la cancha con la faena bien hecha. Iba el encuentro 1-0 para su equipo y Scholl gobernaba la contienda con suficiencia. Pero se fue Matthaus, cambiaron a Basler, y el Bayern desapareci¨® en un bander¨ªn de c¨®rner desde donde el Manchester firm¨® el remonte. "Perder una final siempre resulta duro", acert¨® a decir Matthaus, "y m¨¢s de esta manera. No ha ganado el mejor equipo, sino el que ha tenido m¨¢s suerte. No hay nada que reprocharnos". Las palabras sonaron m¨¢s dulces que el gesto. Matthaus fue el ¨²ltimo que subi¨® al podio para recoger la medalla de subcampe¨®n y, una vez colgada, se la arranc¨® del cuello.