A Espa?a ya le tratan de us¨ªa

La transfiguraci¨®n del deporte espa?ol en general se ve con especial brillo en el balonmano: de pa¨ªs segund¨®n a potencia indiscutible, con dos medallas de plata en los Europeos y una de bronce en los Juegos Ol¨ªmpicos a partir de 1996. Y ahora llega el Mundial de Egipto (del 1 al 15), donde Espa?a, Francia y el equipo anfitri¨®n -entrenado por el espa?ol Javier Garc¨ªa Cuesta- se unen a los cl¨¢sicos favoritos eslavos, escandinavos y magiares.El seleccionador, Juan de Dios Rom¨¢n, dice que "el objetivo b¨¢sico es el 7? puesto, que clasifica para los Juegos de Sydney". Pero ¨¦l sabe que no lograrlo se interpretar¨ªa como un desastre sin paliativos: "Nunca hab¨ªa tenido tantos problemas agradables para elegir a los 16 componentes. Dispongo, como m¨ªnimo, de tres jugadores muy buenos para cada puesto", reconoce. Por lo tanto, el list¨®n l¨®gico est¨¢ en el podio. Pero la l¨®gica se topa en este caso con un factor casi aleatorio: es muy probable que, el 11 de junio, Espa?a se cruce en cuartos de final con un rival de armas tomar: Suecia, Yugoslavia o Francia. Todo indica que Espa?a es hoy superior a los tres en un hipot¨¦tico duelo a cinco partidos; pero bastar¨ªa perder precisamente ¨¦se para luchar por los puestos 5? al 8?. As¨ª se entiende mejor la curaci¨®n en salud de Rom¨¢n, que recuerda: "El Mundial es nuestra asignatura pendiente. Nunca hemos pasado del 5? lugar y es frecuente que perdamos el s¨¦ptimo partido". Da la casualidad de que el 7? en Egipto ser¨¢ el del d¨ªa 11.

Antes, la selecci¨®n espa?ola debe reinar en el grupo A sobre Dinamarca, T¨²nez, Argelia, Marruecos y Argentina, y superar en octavos de final a un adversario c¨®modo, el 4? del grupo B, en el que s¨®lo Egipto y Alemania son temibles. M¨¢s poderoso es el C, con Rusia, Hungr¨ªa y Croacia. La ¨²nica inc¨®gnita para Espa?a en la fase previa es su capacidad de adaptaci¨®n a la extra?a y pegajosa defensa de los tres equipos africanos.

Profesionalidad

La ca¨ªda del muro de Berl¨ªn y el cese del mimo estatal al deporte en los pa¨ªses del Este produjeron que la masiva emigraci¨®n de las estrellas del balonmano coincidiera con el trabajo serio y profesionalizado en el deporte espa?ol. Dos de esos maestros, los nacionalizados Talant Duisheb¨¢iev y Andr¨¦i Shepkin son hoy puntales de la selecci¨®n. Sin embargo, el primero de ellos no est¨¢ fino tras una temporada de lesiones y agobios en la Bundesliga alemana: "Admito que me preocupa. Pero Talant es un genio, e intuyo que resurgir¨¢ durante la fase previa", dice el seleccionador espa?ol.

Cinco clubes espa?oles acaban de mostrar su poder¨ªo, una vez m¨¢s, llegando a las cuatro finales de competiciones europeas masculinas. Empero, el seleccionador advierte: "Eso no equivale autom¨¢ticamente a que debamos ganar el Campeonato del Mundo".