Escribir el gui¨®n de la vida

Parece probado que el gui¨®n de la vida de cualquier individuo est¨¢ escrito en sus genes. Pero que sea as¨ª no implica que el final de la vida sea ¨²nico. Xavier Estivill, director del CGMM (Barcelona), sostiene que la alteraci¨®n de un gen no necesariamente desemboca en una enfermedad. Simplemente, dice, facilita que una patolog¨ªa pueda desarrollarse si existen factores externos que la impulsan. Es decir, se trata de alteraciones que determinan predisposici¨®n. Por ello, en su opini¨®n, el desarrollo de los microchips de ADN no s¨®lo va a ser trascendente para la investigaci¨®n y el diagn¨®stico de enfermedades, sino incluso para una nueva orientaci¨®n de la medicina preventiva. Modelo que se basar¨ªa en la definici¨®n de pautas de conducta que eviten los riesgos ambientales que propician que la alteraci¨®n gen¨¦tica "abandone su letargo" y provoque la enfermedad.Los microchips, a?ade, ser¨¢n ¨²tiles tanto para el an¨¢lisis de un ¨²nico gen, como los actualmente disponibles en fase precomercial, como para una bater¨ªa de genes. El primer producto de esta categor¨ªa fue anunciado el pasado abril por cient¨ªficos del Cedars-Sinai Medical Center (Los ?ngeles). El microchip multig¨¦nico permite identificar 13 genes implicados en tumores cerebrales con el an¨¢lisis de entre 18.000 y 20.000 genes a la vez.

En el futuro, han dicho responsables de Genome Systems, empresa encargada de su desarrollo, no se descarta hacer chips similares que puedan usarse para la detecci¨®n de ciertas patolog¨ªas o la predisposici¨®n a ellas en reci¨¦n nacidos.