LA CR?NICA Acotar la ausencia ANA MAR?A MOIX
Sine es el t¨ªtulo de la exposici¨®n de Eduard Arb¨®s. Y tambi¨¦n del libro que, como parte de esta exposici¨®n, ha realizado en colaboraci¨®n con Ramon Dachs. El encuentro entre Eduard Arb¨®s (Barcelona 1959), artista pl¨¢stico, y el poeta Ramon Dachs era inevitable. Y debe de haber sido obra de qui¨¦n sabe qu¨¦ combinaci¨®n matem¨¢tica, o de la coincidencia entre el n¨²mero de veces que una determinada nota se repite en una determinada sinfon¨ªa y el n¨²mero de formas ausentes en una determinada geometr¨ªa. Cada cual por separado, uno a trav¨¦s de la pintura, el otro a trav¨¦s de la poes¨ªa, hab¨ªan emprendido un camino similar: depurar el lenguaje art¨ªstico hasta lograr expresar lo esencial con los recursos m¨ªnimos. ?se ha sido el empe?o de Ramon Dachs en sus soberbios Poemas m¨ªnimos (editados en catal¨¢n originariamente y traducidos al castellano por Anne-H¨¦l¨¨ne Su¨¢rez), y en Interminims de navegaci¨® po¨¨tica, experiencia hipertextual a trav¨¦s de Internet, medio del que el poeta se ha valido para presentar su escritura geom¨¦trica que rompe la linealidad del texto ("herencia de la cultura oral", en opini¨®n del autor) por medio no de la tecnolog¨ªa sino aunando literatura y geometr¨ªa ("de modo que la estructura del discurso, la sintaxis, responde a la ordenaci¨®n geom¨¦trica"). Eduard Arb¨®s, por su parte, lleva realizadas seis exposiciones individuales y varias colectivas (Barcelona, Madrid, Palma de Mallorca, Tur¨ªn, Chicago...) que muestran una indagaci¨®n constante: la construcci¨®n espacial. Ahora, en Sine (galer¨ªa Alejandro Sales, hasta finales de junio) la pared es el cuadro. Sin el soporte de la tela, sin texturas ni materiales pict¨®ricos, sin las delimitaciones del bastidor, las piezas de aluminio de Eduard Arb¨®s aparecen insertadas en el muro. Son formas planas que responden a un tratamiento en ocasiones m¨¢s cercano al de la escultura que al de la pintura, y tanto cabe pensarlas parte de la pared en las que han sido instaladas y que las contiene, como elementos generadores de un espacio donde la pared aparece como una de las piezas que lo componen. Como en su obra anterior, Eduard Arb¨®s sigue reflexionando sobre el espacio. Pero, a diferencia de sus muestras precedentes, ahora el artista elabora su indagaci¨®n espacial trabajando con materiales ajenos a los de la pintura tradicional y adopta el aluminio, sacando un valios¨ªsimo partido de la propiedad especular de dicho material y de los brillos y sombras que crea en su superficie la incidencia de la luz. En Sine las instalaciones de aluminio parecen negar el car¨¢cter infranqueable de las paredes; m¨¢s bien les prestan una ilusi¨®n de abertura, de paso a una realidad espacial hecha de blancos y vac¨ªos, de huecos y silencio, de ausencia matem¨¢ticamente acotada. "?Es Arb¨®s un neoplasticista tard¨ªo, un constructivista sensible, un ¨®ptico o un geom¨¦trico espacialista?, porque es a todas luces evidente que ¨¦l pertenece a esta estirpe, la de aquellos que siguen la senda que Mondrian denomin¨® cromopl¨¢stica", escribi¨® Daniel Giralt-Miracle refiri¨¦ndose al pintor, cuya obra comparaba con un gran pentagrama de m¨²sica concreta. Sine, ausencia acotada, es tambi¨¦n el t¨ªtulo del libro presentado en esta exposici¨®n. Cuatro poemas de Ramon Dachs escritos en catal¨¢n, castellano, gallego y franc¨¦s, y tres aguafuertes y tres serigraf¨ªas de Eduard Arb¨®s coinciden en la elaboraci¨®n de m¨²ltiples umbrales que dan paso a la pureza de la oquedad, a la ilusi¨®n de una nada que libera nostalgias y horizontes en blanco. La rigurosa desnudez de ecos y formas genera una geometr¨ªa que, como es la del deseo, repele todo cuanto no participe de lo esencial y absolutamente necesario. Como en las cajas rusas, las p¨¢ginas del libro contienen, plasmada mediante otros lenguajes y con distintos materiales, la exposici¨®n instalada en las paredes de la galer¨ªa. Fuera del libro, los juegos de planos formados por las piezas de aluminio instaladas en las paredes crean perspectivas que fusionan realidad y quimera. En el interior del libro, planos y perspectivas interfieren de igual manera, pero con una variante: el papel de plata y la impresi¨®n en negro sustituye al aluminio del exterior.
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