"La familia sobrevive como instituci¨®n porque se ha democratizado"
Muchas voces vaticinaron en los a?os setenta el declive de la familia, pero 30 a?os despu¨¦s, esta instituci¨®n social parece gozar de muy buena salud. El que agoniza es un tipo muy concreto de familia, la autoritaria, pero en su lugar est¨¢ emergiendo una nueva, con formas y energ¨ªas renovadas. ?C¨®mo es esta nueva familia? A esta cuesti¨®n da respuesta In¨¦s Alberdi, catedr¨¢tica de Sociolog¨ªa de la Universidad Complutense de Madrid, en el libro La nueva familia espa?ola, que publica la editorial Taurus. Feminista y autora de varios ensayos sociol¨®gicos, Alberdi desmenuza en su ¨²ltima obra los cambios operados en los ¨²ltimos a?os. Pregunta. ?Porqu¨¦ se mantiene la familia, despu¨¦s de haber sido tan denostada? Respuesta. Porque sigue siendo importante y significativa para la mayor¨ªa de la poblaci¨®n, incluidos los j¨®venes. En todas las encuestas, cuando se pregunta qu¨¦ se considera m¨¢s importante, la familia aparece casi siempre en primer lugar. Pero ocurre que no todos se refieren a la misma familia. Unos hablan del n¨²cleo inmediato de convivencia, y otros de la red de parentesco y solidaridad m¨¢s amplia. De eso hablan, por ejemplo, los j¨®venes que viven solos o con amigos, y consideran a la familia lo m¨¢s importante. A veces se cree que s¨®lo los que tienen formas de convivencia convencional defienden a la familia, y no es as¨ª. P. Pero aumenta el n¨²mero de personas que viven solas. R. Es cierto. Sobre todo el n¨²mero de mujeres que viven solas. Pero suelen tener unas relaciones muy estrechas con padres, hermanos, sobrinos. Una cosa es la forma de convivencia, que est¨¢ cambiando, y otra la familia como red de solidaridad y apoyos, que permanece intacta. P. ?Y por qu¨¦ es as¨ª? R. Tiene que ver con los cambios que ha sufrido la vida de las mujeres. Esa estructura fuerte de ayuda que ha sido la familia ha descansado siempre sobre el trabajo invisible y sacrificado de las mujeres. Cuando las mujeres han querido autonom¨ªa, han desafiado a la familia, porque era la instituci¨®n que las ten¨ªa atrapadas, y por eso ha sido tan fuerte la reacci¨®n de las feministas contra la familia patriarcal. Pero en estos a?os, la familia se ha transformado y sobrevive como instituci¨®n, porque se ha democratizado y ya no produce este sentimiento de opresi¨®n. Las mujeres se sienten m¨¢s libres dentro de la familia y los j¨®venes tambi¨¦n. P. Por eso ahora, a diferencia de la generaci¨®n anterior, ya no se van de casa. R. Claro. Porque en estos a?os se han producido dos grandes cambios: la igualdad entre el hombre y la mujer en el matrimonio y la extensi¨®n de la tolerancia ante los comportamientos distintos. Curiosamente, en Espa?a hay menos parejas de hecho, menos hogares monoparentales o familias homosexuales que en otros pa¨ªses de Europa, pero se ha extendido la tolerancia hacia otras formas de convivencia. P. ?Y no es eso algo contradictorio? R. S¨ª, aqu¨ª los cambios son m¨¢s lentos, pero la tolerancia es mayor. Eso se ve muy claro, por ejemplo, en el divorcio. Hay muchos menos divorcios, pero existe una gran tolerancia respecto a la ruptura y es mayoritaria la idea de que, cuando una pareja va mal, es mejor que se separe. P. ?Y no se ven signos de involuci¨®n? R. Los hay, pero no encuentran eco. La Iglesia, por ejemplo, es en nuestro pa¨ªs una instituci¨®n muy intolerante. Siempre est¨¢ lanzando ideas disparatadas, como la expresada por el arzobispo de Valencia sobre el trabajo de las mujeres. Pero no cuenta mucho. Los espa?oles siguen celebrando bodas en las iglesias, pero luego no siguen para nada sus directrices en cuestiones tan importantes como la sexualidad o la educaci¨®n de los hijos. P. Contrariamente a lo que parec¨ªa que iba a suceder, usted afirma en su libro que hoy los abuelos est¨¢n m¨¢s presentes en la vida familiar que nunca. R. As¨ª es. Se ha producido una resocializaci¨®n de la gente mayor, que ha aceptado muy bien los cambios de los j¨®venes. Hoy, las abuelas son mujeres a¨²n j¨®venes que est¨¢n ayudando a sus hijas a vivir los cambios que ellas no han tenido. Las ayudan a estudiar, a emanciparse, a tener hijos sin dejar de trabajar. P. Pero cuando estas hijas tengan hijas mayores, seguramente ya no podr¨¢n hacer lo mismo, porque no tendr¨¢n tiempo. R. Entonces los cambios estar¨¢n consolidados. Lo excepcional de las abuelas de hoy es que ellas no han cambiado de vida pero han ayudado a que la de sus hijas cambie. Y de cara al futuro, es evidente que se habr¨¢ de ampliar la red de guarder¨ªas y servicio sociales para cubrir las necesidades de la familia. P. La familia es importante para la gente, pero con las actuales tasas de natalidad, no parece que tenga mucho relevo. R. La clave para que los j¨®venes formen una familia, cualquiera que sea la forma, y tengan hijos es crear empleo para las mujeres j¨®venes. Han cambiado tanto las cosas, que las mujeres no tienen hijos si no est¨¢n emancipadas y, sin empleo, no lo est¨¢n. P. Seguramente tambi¨¦n ha cambiado el concepto de maternidad. R. Ahora se tienen menos hijos, pero son m¨¢s deseados que nunca y, por eso, se les quiere tener en mejores condiciones. Se les quiere tener bien atendidos y eso requiere cierto nivel de ingresos y estabilidad en el empleo. S¨®lo en los pa¨ªses que han aplicado pol¨ªticas de empleo y servicios sociales de apoyo a la familia ha aumentado la natalidad. P. El candidato socialista Pasqual Maragall ha prometido que, si forma gobierno, aplicar¨¢ el criterio de paridad entre hombres y mujeres. ?Qu¨¦ le parece? R. Me parece muy bien y Maragall me parece un gran candidato, porque re¨²ne dos cualidades muy importantes: una personalidad pol¨ªtica muy avanzada que conecta con los j¨®venes y los sectores m¨¢s innovadores del pa¨ªs, y una larga experiencia en la gesti¨®n de los asuntos de todos en la transformaci¨®n de una gran ciudad como Barcelona.
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