Escapar del vag¨®n de cola
La comunidad murciana ve lastrado su potencial por sus m¨²ltiples carencias, sobre todo en infraestructuras viarias
"Espa?a va bien, pero Murcia va mejor". ?sta es una de las frases favoritas del presidente de la comunidad, Ram¨®n Luis Valc¨¢rcel (PP). Para llegar a esta conclusi¨®n, ofrece una retah¨ªla de los logros de su Gobierno en esta primera legislatura popular: 22.000 parados menos que en 1995; un crecimiento econ¨®mico por encima de la media nacional, con cuatro d¨¦cimas de punto en 1998, y una tasa de endeudamiento de las m¨¢s bajas: alrededor de los 100.000 millones de pesetas.Frente a este balance, otras realidades muestran una Murcia distinta: sus trabajadores son los que perciben los salarios m¨¢s bajos, con un n¨²mero de contratos indefinidos por debajo de la media nacional -un 9% frente al 13%, en el pasado mes de mayo-, y la siniestrabilidad laboral es de las mayores, sin olvidar los agravios comparativos en materia educativa y sanitaria, con una de las tasas de inversi¨®n por habitante m¨¢s bajas.
Murcia va mejor que Espa?a, seg¨²n Valc¨¢rcel, pero, en cualquier caso, todav¨ªa quedan importantes cuestiones por resolver para que deje de ser considerada Objetivo 1 de la Uni¨®n Europea o, lo que es lo mismo, vag¨®n de cola en el ¨¢mbito europeo.
Para abandonar esta posici¨®n precisa, entre otros aspectos, ser incluida en la Red Transeuropea de Transportes, un programa de inversiones en las infraestructuras viarias -las carreteras y el ferrocarril- que en estos momentos es objeto de discusi¨®n en Bruselas. Valc¨¢rcel, por supuesto, se muestra optimista. Por algo es ponente en el grupo que desarrolla el borrador del Libro Blanco del transporte europeo.
Los viajes de Valc¨¢rcel para participar en los foros europeos de decisi¨®n son frecuentes. Tanto, que, como presidente de la comunidad, habr¨¢ recorrido al final de la legislatura m¨¢s de 200.000 kil¨®metros. Eso s¨ª, el avi¨®n lo coge en Alicante o Madrid, ya que Murcia carece de un aeropuerto civil, una infraestructura que ahora es objeto de promesa electoral, pero "m¨¢s como aspiraci¨®n que como prioridad", reconoce el candidato popular a la reelecci¨®n. Tampoco puede a¨²n Valc¨¢rcel viajar a Madrid por una autov¨ªa completa. Resta construir un centenar de kil¨®metros hasta Albacete, aunque hace unos d¨ªas se abri¨® al tr¨¢fico un tramo de 11 de un proyecto ya licitado por la anterior Administraci¨®n socialista, una inauguraci¨®n que el aspirante de este partido, Ram¨®n Ortiz, califica de "apropiaci¨®n indebida" y atribuye "al af¨¢n desmedido de protagonismo del PP".
El ferrocarril es otro motivo de atraso para Murcia, si bien los populares aseguran que en la pr¨®xima legislatura saldr¨¢ el nuevo mapa, que debe contemplar la velocidad alta para las l¨ªneas Cartagena-Madrid y Murcia-Alicante. De momento, el Euromed, el tren que conecta todo el eje mediterr¨¢neo hasta Barcelona, tiene su ¨²ltima parada en Alicante y se calcula que para el a?o 2004 llegar¨¢ a Murcia.
Pese a la carencia de infraestructuras, los empresarios han demostrado su capacidad exportadora, uno de los baluartes de la econom¨ªa regional. En 1998 superaron los 400.000 millones, con un crecimiento del 15% mientras que el de la media nacional era de un 7%.
No obstante, a pesar de ese dinamismo, el d¨¦ficit h¨ªdrico de la cuenca del Segura condiciona la producci¨®n agraria a los env¨ªos de agua del trasvase Tajo-Segura y a lo que determine en este sentido el Plan Hidrol¨®gico Nacional, otro de los factores que mantiene en vilo a los murcianos.
Para que Murcia abandone el vag¨®n de cola de la UE, el Gobierno regional present¨® en marzo el borrador del Plan Estrat¨¦gico para los a?os 2000-2006, con una financiaci¨®n prevista de 1,7 billones de pesetas, a repartir entre las distintas administraciones y el sector privado. En ¨¦l se propone un nuevo modelo econ¨®mico, sin la actual dependencia de la industria agroalimentaria.
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