Sin andamios en el 2000

, Si se cumplen los planes, la Real Bas¨ªlica de San Francisco el Grande perder¨¢ en el a?o 2000 una buena parte de su fisonom¨ªa. A partir del pr¨®ximo milenio empezar¨¢n a desaparecer de este templo la mara?a de andamios, que ya se ha convertido en un elemento m¨¢s de esta iglesia. Realmente son pocos los que la recuerdan sin ellos. "Queremos borrar la imagen de San Francisco llena de andamios", se proclam¨® ayer desde el Ministerio de Educaci¨®n y Cultura, donde se rubric¨® un convenio tripartito, el documento por el que se inyectar¨¢n otros cien millones de pesetas en las obras de restauraci¨®n del templo, que terminar¨¢n con la eliminaci¨®n de los famosos y caracter¨ªsticos andamios. Las tres partes presentes ayer en la firma de este acuerdo eran el secretario de Estado de Cultura, Miguel ?ngel Cort¨¦s; el subsecretario de Asuntos Exteriores, que adem¨¢s es el presidente del Patronato de la Obra P¨ªa de los Santos Lugares de Jerusal¨¦n, propietaria de la iglesia, y Jos¨¦ Luis Anto?anza, consejero de Iberdrola. Las tres instituciones aportar¨¢n los 102 millones de pesetas con los que se emprender¨¢ la segunda fase de las (interminables) obras de restauraci¨®n de este templo, en cuya construcci¨®n, que comenz¨® a finales del siglo XVIII, participaron los arquitectos Ventura Rodr¨ªguez, Francisco Cabezas y Sabatini. A partir de ahora, los trabajos de acondicionamiento del templo se centrar¨¢n en las restauraci¨®n de las pinturas murales (25 millones) y la restauraci¨®n de los ventanales de la c¨²pula (otros 25 millones). Se arreglar¨¢ tambi¨¦n la linterna y se renovar¨¢ el sistema el¨¦ctrico, para lo que se destinar¨¢n 52 millones. A pesar de estas intervenciones, queda bastante faena en el templo: "Hay obra para mucho tiempo. Lo que queda por hacer es abrumador", reconoci¨® ayer Isabel Cabrera, directora del Instituto del Patrimonio Hist¨®rico. "Quedan a?os de trabajos. Unas obras as¨ª no se pueden hacer como si pasara una apisonadora porque destrozas el monumento", a?adi¨® Cabrera. Entre los trabajos que habr¨¢ que acometer en el futuro, est¨¢ la restauraci¨®n del coro y del presbierio y todas las capillas que contiene la bas¨ªlica. Cabrera tambi¨¦n quiere evitar cualquier malentendido sobre los andamios: "Que la gente no piense que ya no habr¨¢ andamios nunca m¨¢s. Los tendremos que poner donde los requieran las obras". En cualquier caso, la mayor parte de ellos, los que no desaparecen nunca de la vista cuando se penetra en el templo, dejar¨¢n de molestar. De hecho, buena parte de los andamios se suprimieron hace un a?o, cuando finaliz¨® la primera fase de la restauraci¨®n. Entoces se volvi¨® a celebrar misa en este templo. Los andamios se introdujeron en este monumento hace dos d¨¦cadas. Pero hasta hace tres a?os nadie se ocup¨® de darles uso. En 1996 se reanudaron las obras con una inversi¨®n de algo m¨¢s de 100 millones, que se emplearon en la restauraci¨®n del arco faj¨®n, en la consolidaci¨®n de los murales del interior y la restauraci¨®n de varias cubiertas y patios de este hist¨®rico templo.