VIGILIA ELECTORAL Reflexi¨®n... de la luz AGUST? FANCELLI
Ritos electorales. En las jornadas de reflexi¨®n los ciudadanos se supone que reflexionamos, aunque reflexiono que poco debemos de reflexionar desde el momento que para hacerlo necesitamos ponerle ese t¨ªtulo al d¨ªa. Por su parte, en las jornadas de reflexi¨®n, los candidatos no reflexionan como lo hacen los ciudadanos corrientes -no lo necesitan: en principio saben ya a qui¨¦n votar-, por lo que tienen su propio approach con el asunto de la reflexi¨®n: en su caso no es de ideas, sino de luz. Vaya, que se hacen fotos juntos y sonrientes como si nada hubiera pasado. A las once de la ma?ana todos -?todos? ?No! Clos y Molins llegan ad libitum, a las 11.15 horas- est¨¢n en el Pla de l"Os, reci¨¦n duchados, para la foto de los colegas de El Peri¨®dico. Agust¨ª Carbonell se ha tra¨ªdo una escalera de mano que previamente le ha servido para retratar a varios turistas que se lo han pedido. El orden de colocaci¨®n en la foto es la ¨²nica reflexi¨®n de orden mental que los candidatos se permiten en los d¨ªas de reflexi¨®n. Forma parte de la tradici¨®n el forcejeo simp¨¢tico de ¨²ltima hora, el codazo para dejar las cosas en su sitio. En este caso, el que da sin man¨ªas Rahola para colocarse entre Fisas y Molins, el uno dispuesto a situarse al lado del otro, pero el otro al lado del uno, no. La cosa dura pocos minutos. Luego los candidatos desaparecen en el interior del Liceo para una sesi¨®n privada de periodismo de sal¨®n y vuelven a reaparecer en la pasarela del Marem¨¤gnum, donde les espera el fot¨®grafo de EL PA?S, Joan S¨¢nchez. S¨¢nchez ha optado por un atrezzo simple pero altamente simb¨®lico: la bicicleta. La movilidad ha sido uno de los pocos temas estrella de esta campa?a, efectivamente. Cuando S¨¢nchez comunic¨® a los candidatos la idea, les pareci¨® bien a todos, pero m¨¢s de uno pregunt¨® si la foto ser¨ªa circulando o pie al suelo. Al parecer, alg¨²n alcaldable no est¨¢ muy seguro de su dotes de equilibrio. En fin, que llegan las bicis. Seis. Gasull, risue?o, susurra: "Sempre en porteu sis de tot, no s¨¦ perqu¨¨". Al cabo llega la s¨¦ptima, la de Gasull. Las bicis son de la casa Biciclot. Molins: "?Biciclos!". Son como ni?os. Sopla un levante agradable, aunque suficiente para despeinar, naturalmente a quien le queda algo por despeinar. Rahola tiene alg¨²n problema para encaramarse al sill¨ªn con la falda tubo que me lleva, pero lo consigue al fin. Ahora ya todo va de buen rollo, por lo que se someten al orden que les manda S¨¢nchez sin rechistar. Por lo que a m¨ª se refeiere, hago lo que siempre he deseado hacer: cortar el tr¨¢fico. No crean, tiene su m¨¦rito. A esa hora, mediod¨ªa, mucha gente va paseando por all¨ª. "?Vamos a hacer una foto! ?Por favor, esperen!", lanzo, apoyando sobre el diafragma hasta donde soy capaz. Sorpresa. No cuesta nada parar el tr¨¢fico. La gente conoce el ritual del d¨ªa de reflexi¨®n y lo respeta. Los ciudadanos abren espacios ordenadamente y dejan campo libre al objetivo de S¨¢nchez. ?Todos? ?No! Unos guiris cruzan alegremente, sin enterarse de nada. Les reconvengo por su actitud y siguen sin enterarse de nada. Al cabo, caen en la cuenta. "?Candidatos a las europeas?", preguntan. No exactamente, luego se lo explico. Qu¨¦ relativo es todo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.