Dirigentes de Izquierda Unida temen una maniobra de Anguita para depurar la direcci¨®n

Como si la votaci¨®n de la noche anterior respaldando a Julio Anguita no se hubiera producido, dirigentes de IU criticaban ayer, en privado, al coordinador general por no abandonar el cargo tras el descalabro electoral del 13-J. Para estos dirigentes, la pirueta efectuada por Anguita, que le ha permitido no dimitir y obligar a los dem¨¢s a presentar su renuncia, es la primera fase de una operaci¨®n que buscar¨ªa la depuraci¨®n de la direcci¨®n federal, eliminando elementos molestos a su gesti¨®n. Ayer ca¨ªa sobre Anguita un chaparr¨®n de cr¨ªticas sobre su discurso electoral, en especial por los ataques a Javier Solana.

Madrugada del martes. Al filo de las dos. Los miembros de la Presidencia federal de IU votaban s¨ª a una propuesta de Anguita que les pon¨ªa en la pura calle. Tal vez por el cansancio, por la inercia de las cosas, porque resulta dif¨ªcil, tras tantos a?os, romper viejas costumbres -o hasta por hambre, si bien se mira-, pero votaron s¨ª. Atr¨¢s quedaban casi diez horas de cruce de acusaciones, palabras gruesas, feroces cr¨ªticas, y, al final, como escribiera el poeta, "aire, oropel y nada". Anguita lleg¨® a decirles que "estaba harto de ellos", de sus deslealtades y de sus luchas internas. Su propuesta, retrasando su propia dimisi¨®n al Consejo Pol¨ªtico y exigiendo la renuncia "por escrito" de cada uno de los miembros de la Comisi¨®n Permanente, el m¨¢ximo ¨®rgano de direcci¨®n de IU, tuvo -pero s¨®lo al d¨ªa siguiente- respuesta de numerosos dirigentes federales. Dios lo da y Dios lo quita, porque a quienes el l¨ªder de IU pidi¨® firmada de propia mano su renuncia hab¨ªan sido elegidos a dedo anguitista. ?Qu¨¦ pasar¨¢ ahora? Se dijo en alg¨²n momento en la reuni¨®n de la Presidencia y ayer hubo dirigentes que lo ratificaron: se estaba utilizando la crisis provocada por las elecciones para realizar una depuraci¨®n en el m¨¢ximo ¨®rgano de direcci¨®n de IU.

Franco Gonz¨¢lez, del Pasoc, reiteraba lo que hab¨ªa dicho la noche anterior en la Presidencia: "Esto puede entenderse como una depuraci¨®n. Corremos el riesgo de que Anguita, con nuestra renuncia en la mano, vuelva y conforme una nueva direcci¨®n con sus leales. La pluralidad y el respeto a las minor¨ªas quedar¨¢n rotos".

Muy parecido a lo que pensaba ayer Isabelo Herreros (Izquierda Republicana) que ya hab¨ªa presentado hace semanas su dimisi¨®n en la Comisi¨®n Permanente, precisamente por esa falta de pluralidad. "Es una manera de hacer limpieza y librarse de elementos molestos".

Otros ped¨ªan el anonimato para se?alar que, al final, "ha vencido, como siempre, el miedo". Seg¨²n estas fuentes, el PCE fren¨® la ca¨ªda de Anguita s¨®lo y exclusivamente para impedir un vac¨ªo de poder en IU. No est¨¢ asegurada la sucesi¨®n, aunque se habla de Felipe Alcaraz como la persona que podr¨ªa asumir la direcci¨®n. Seguramente. Se aprende en las derrotas. Y Alcaraz ha perdido suficientes batallas como para aceptar la responsabilidad de llegar a las generales con una organizaci¨®n en plena descomposici¨®n. Nunca ha tenido prisa y, ahora, menos. Tiempo habr¨¢ de recoger lo que quede y empezar de nuevo.

Pero donde han coincidido pr¨¢cticamente todos los dirigentes ha sido en la necesidad de cambiar el discurso. Algo, que, por otra parte, Anguita ya ha advertido que no consentir¨¢. Ayer ped¨ªan ese cambio desde Rosa Aguilar a Felipe Alcaraz, pasando por dirigentes regionales o locales. Y m¨¢s concreto: pocos son lo que todav¨ªa defienden la postura electoral de Anguita en la guerra de Yugoslavia y el calificativo de criminal de guerra que atribuy¨® a Javier Solana. Ya sin paliativos. Alonso Puerta se?alaba que "no se puede situar a Solana y Milosevic al mismo nivel" y advert¨ªa que la apuesta por Lizarra hab¨ªa sido otro de los elementos de rechazo electoral.

Rosa Aguilar, posible alcaldesa de C¨®rdoba, echaba tambi¨¦n su cuarto a espadas para reconocer, en declaraciones a Antena 3, que la coalici¨®n "ten¨ªa que haber explicado mejor que estaba contra Milosevic y la guerra". F¨¦lix Taberna, responsable de IU en Navarra, reconoc¨ªa que la presencia de IU en Estella hab¨ªa creado confusi¨®n entre los votantes y ped¨ªa una renovaci¨®n del discurso.

El terremoto electoral ha movido, al final, pocas sillas. Antonio Herreros, coordinador de Castilla y Le¨®n, pon¨ªa su cargo a disposici¨®n de los ¨®rganos de su federaci¨®n. Y Gaspar Llamazares, m¨¢ximo responsable asturiano, reconoc¨ªa la derrota pero no se planteaba la dimisi¨®n. Pocos lo han hecho sin presiones. En justicia habr¨ªa que destacar a Pablo Castellano, aut¨¦ntico impulsor de asumir la responsabilidad de los resultados con lo ¨²nico que tiene un dirigente: su propio cargo.

Todos, eso s¨ª, coinciden en la necesidad de elaborar un nuevo discurso. Pero, ?cu¨¢l, si Julio Anguita ya ha advertido que si se cambia un mil¨ªmetro el actual ¨¦l se marcha? Isabelo Herreros en la madrugada del lunes citaba con sorna la ir¨®nica carta de Bertolt Brecht al gobierno de la antigua Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana (RDA), que tambi¨¦n se lamentaba de que el pueblo no le entendiera: "Si no nos entiende el pueblo, cambiemos de pueblo".

No dijo tanto Anguita, pero, la verdad, es que le falt¨® bien poco. Hay gente que coge las dimisiones con papel de fumar.