Dos hermanas se disputan una alcald¨ªa

El bipartidismo tiene apellidos comunes en Castillejo-Sierra, un peque?o pueblo de Cuenca. Dos hermanas, Rosal¨ªa (PP) y Mar¨ªa ?ngeles Clares L¨®pez (PSOE), han empatado a 19 votos, y ahora un sorteo, previsto para hoy por la Junta Electoral, habr¨¢ de sellar qui¨¦n de ellas ser¨¢ la alcaldesa, aunque ambas estar¨ªan dispuestas a establecer periodos rotatorios. Y, seg¨²n Esteban Vivero, que a sus 75 a?os ejerce de analista electoral en el ¨²nico bar del pueblo (perteneciente a la candidata popular), si los seis abstencionistas que tiene fichados hubieran votado, se habr¨ªa mantenido el empate porque tambi¨¦n tienen el coraz¨®n partido entre las dos pol¨ªticas. Las quieren por igual. S¨®lo dividen el voto por cuesti¨®n de partido. "Si es que las conocemos desde que eran dos cr¨ªas", dice Mariano. "No ponga apellidos, en el pueblo no hay otro Mariano". Nadie espera una lucha cainita. Les une el amor fraterno y no pocos paralelismos. Mar¨ªa ?ngeles tiene 34 a?os y dos hijos, uno de doce y otro de ocho. Rosal¨ªa, tiene 33 y un ni?o de siete y una ni?a de diez. Los primos, ajenos a si su t¨ªa o su madre ser¨¢ la alcaldesa, juegan pl¨¢cidamente a sumergir mu?ecos en la fuente del pueblo. Rosal¨ªa explica por qu¨¦ han saltado a la pol¨ªtica: "Para que no se fuese de aqu¨ª la alcald¨ªa, porque tem¨ªamos que se fuera a otro pueblo si nadie se presentaba". La idea surgi¨® sin previo concierto. "Cada una se present¨® por su lado sin m¨¢s comentarios porque nunca hablamos de pol¨ªtica entre nosotras. Nos enteramos por otras personas", explica Rosal¨ªa. "A todo el mundo le sorprende que no haya rivalidad entre nosotras", apostilla la hermana socialista. No han recurrido a descalificaciones ni a asuntos personales en la campa?a. Una campa?a sin m¨ªtines. "Nosotros organizamos uno y no vino nadie", dice la candidata del PSOE. Bueno, nadie, no. "Vino otro orador y me puse a hablar con ¨¦l", apostilla. La hermana popular, m¨¢s previsora, avis¨® al partido para que no organizara nada. "No veng¨¢is porque aqu¨ª la gente tiene las ideas muy claras y no hace falta ning¨²n mitin". "Las dos somos igual de queridas y la prueba est¨¢ en que la gente nos ha votado por sus ideas ", dice Mar¨ªa ?ngeles. Tampoco han cuestionado si ejercer en el bar y de cartera en verano (Rosal¨ªa) o ayudar al marido con las ovejas (Mar¨ªa ?ngeles) colisionar¨¢ con su actividad p¨²blica. Responden a d¨²o "no, no, no" cuando se les pregunta si, m¨¢s all¨¢ de su diferente ideario, tienen una concepci¨®n distinta sobre qu¨¦ hacer en esta aldea. Entrecruzan sus frases. Hablan en est¨¦reo un mismo lenguaje municipal. "La pol¨ªtica que se hace a nivel nacional no tiene nada que ver con lo que se hace aqu¨ª en los pueblos. Miramos las dos por este lugar para que, aunque sea peque?o, no se quede as¨ª".

"Creo que no vamos a diferir en nada. Cuando hemos hablado coincidimos en los problemas". La candidata popular, fiel a su espontaneidad, puesta a elegir entre los primeros espadas de su partido, s¨®lo admite sentir admiraci¨®n por Alberto Ruiz-Gallard¨®n. "Me parece que es una buena persona". No se moja por ning¨²n otro. Su hermana tampoco es ninguna arribista. "A m¨ª el que me ca¨ªa bien era Felipe Gonz¨¢lez, la verdad; se expresaba bien y no se met¨ªa con el partido contrario". Todo apunta que el azar romper¨¢ este empate pol¨ªtico. "Parece que van a sortear qui¨¦n es la alcaldesa. Pero a¨²n no sabemos".

Las dos no dudan al se?alar el mayor problema del pueblo: el repetidor. Funciona mal, y s¨®lo se ve TVE y Telemadrid. Rosal¨ªa habla con aplomo. "Hay caminos que arreglar, pero a ver c¨®mo est¨¢ el presupuesto". Castillejo-Sierra no es el bipartidimo perfecto, es casi la democracia ateniense. "Somos concejo abierto. Todos los vecinos son concejales. Por eso aqu¨ª la culpa nunca ser¨¢ del alcalde, sino de todos". Pero tal foro democr¨¢tico ya ha generado alguna pedrada. El anterior regidor (PSOE) era cu?ado de la candidata socialista. "No se ha presentado porque la gente le ten¨ªa muy cabreado. Se met¨ªan mucho con ¨¦l, sin raz¨®n. Porque aqu¨ª se hace lo que dice el pueblo".

El marido de Rosal¨ªa est¨¢ convencido de que su esposa mirar¨¢ por el bien del pueblo. ?Por qu¨¦? "Porque la obligar¨¦". Luego se r¨ªe, y admite que no har¨¢ falta porque su mujer sabe m¨¢s que ¨¦l. La pol¨ªtica no separa a las dos hermanas; la baraja, s¨ª. "Juegan muy bien a la brisca. Nunca les dejamos ir juntas", explica Mariano, el ¨²nico Mariano.