Los navegantes esperan a Superm¨¢n

"Lo mejor es el v¨¦rtigo que sientes cuando el barco se escora". Quien afirma esto es una persona acostumbrada a luchar por el equilibrio en tierra. La enfermedad de la poliomielitis en sus piernas y brazo izquierdo -atrofia y par¨¢lisis de los m¨²sculos- obligan diariamente a F¨¦lix Alonso a tomar precauciones. Durante una semana, la preocupaci¨®n de este sevillano de 38 a?os, al igual que 30 compa?eros m¨¢s con minusval¨ªas f¨ªsicas agudas, de 19 a 42 a?os, ha estado en experimentar el placer del movimiento en el mar. "Un medio extra?o para nosotros hasta ahora", agrega. La Semana N¨¢utica del centro deportivo Puerto El Cano de C¨¢diz les ha brindado, junto con la Confederaci¨®n Andaluza de Minusv¨¢lidos F¨ªsicos (CAMF), la participaci¨®n en el I Curso de Vela Adaptada que se organiza en Andaluc¨ªa. "El soplido del viento en la cara, cuando rompen las olas y el agua te salpica hacen que todo sea alucinante", cuenta Manolo Barba, natural de San Fernando (C¨¢diz), quien supera la polio con gran humor y desparpajo verbal. Procedentes de toda Andaluc¨ªa, estas personas, algunas con lesiones graves de tetraplejia y paraplejia, han configurado tripulaciones inexpertas "pero llenas de coraje y ganas de aprender que han suplantado sus carencias", explica Salvador Arillo, uno de los monitores que ha compartido con ellos sus temores y dudas. "Al principio estaban muy tensos y lo preguntaban todo pero pronto la qu¨ªmica con el barco y los monitores ha sido formidable". El empe?o de ambas partes ha sido clave. Salvador Arillo relata uno de los ejemplos m¨¢s ilustrativos: "Me he amarrado las piernas para sentir el desequilibrio y buscar los puntos de sujeci¨®n durante la navegaci¨®n". La valent¨ªa y el arrojo de este colectivo est¨¢ fuera de duda, seg¨²n Jorge Moreno, concejal de deportes del Ayuntamiento de C¨¢diz: "Es sobrecogedor comprobar que, a pesar de sus discapacidades, no tienen miedo a volcar". Con todo, esta posibilidad est¨¢ controlada porque los barcos donde navegan pueden volcar, pero, a diferencia de otras embarcaciones, enseguida se dan la vuelta y recuperan su posici¨®n original. Son dos raqueros adaptados con cinco metros de eslora por 1,80 de manga, dos velas, un m¨¢stil de cinco metros y una ba?era o plataforma interior adaptada a las necesidades de los minusv¨¢lidos. Al margen de las clases de vela, estos deportistas han visitado el casco antiguo de C¨¢diz o las bodegas Terry en el Puerto de Santa Mar¨ªa. Y sobre todo, han estrechado lazos entre s¨ª y con el equipo gaditano de vela adaptada -4? en la ¨²ltima Copa de Espa?a-. Han vivido en la residencia del complejo n¨¢utico, en los camarotes de uno de los pabellones del recinto, adaptado a las limitaciones de los discapacitados en el que el Ayuntamiento ha invertido 50 millones de pesetas. La apuesta del consistorio gaditano no es gratuita. Esta experiencia sirve de pre¨¢mbulo al campeonato de Espa?a de Vela Adaptada que se celebrar¨¢ en estas mismas instalaciones a partir del pr¨®ximo jueves y, en especial, a los campeonatos del mundo de la especialidad. Esta cita cobrar¨¢ una repercusi¨®n internacional may¨²scula con la presencia de Christopher Reeve, uno de los mitos vivientes del cine que encarn¨® la figura del Superm¨¢n y que ahora lucha por volver a andar y por abandonar la silla de ruedas en la que est¨¢ postrado por la tetraplejia que padece. Los participantes de este curso han anunciado que no se perder¨¢n este encuentro con Superm¨¢n.