La inocencia de la talla 38
La exhibici¨®n constante en las pasarelas de maniqu¨ªes que usan la talla 38 no incita a las j¨®venes a adelgazar de manera impulsiva y padecer anorexia. Es m¨¢s, "la salud ideal" est¨¢ vinculada a gastar la talla 38 y, a lo sumo, la 40. Esto es lo que piensa la Asociaci¨®n de Creadores de Moda Espa?ola, de la que forman parte dise?adores como Jes¨²s del Pozo, Roberto Verino, Antonio Mir¨®, Javier Larra¨ªnzar, Victorio y Lucchino y Enrique Loewe. Todos ellos se han reunido en Granada por tercer a?o consecutivo coincidiendo con la Festival de M¨²sica y Danza. No obstante, est¨¢n dispuestos a aportar alg¨²n remedio: un seminario que se celebrar¨¢ a mediados de octubre en Madrid y al que invitar¨¢n a cambiar opiniones a dise?adores, m¨¦dicos, enfermos y familiares. A su juicio, la decisi¨®n adoptada por el Sal¨®n Gaud¨ª de Barcelona de prohibir la exhibici¨®n de prendas de vestir inferiores a la talla 40 es "una estupidez". "Nos avergonzamos de formar parte de esta comunidad", declar¨® ayer Enrique Loewe, portavoz de la asociaci¨®n. Son muchos los factores que desencadenan la anorexia, pero entre ellos no se encuentra la influencia de las exiguas maniqu¨ªes que desfilan en los salones de moda. "No acabamos de ver la relaci¨®n entre anorexia y el dise?o de la moda. No hay ninguna responsabilidad por parte de los creadores. Este es un problema m¨¦dico, y hasta gen¨¦tico en muchos casos. La mujer joven tienen horror al paso de la pubertad porque carece de un entorno familiar grato", apostill¨® Loewe, flanqueado por Jes¨²s del Pozo y Roberto Verino. Este grupo de dise?adores ve muchas circunstancias en el origen de la anorexia nerviosa, incluido el nuevo papel que juega la mujer en la sociedad. "La mujer acude al trabajo, las tareas de la casa ya no son lo m¨¢s importante y no vigila como antes los patrones alimentarios de la familia. La madre transmite a la hija esa perplejidad que muchas veces le afecta". Los modistos de la Asociaci¨®n de Creadores de Moda piensa que sus creaciones no son otra cosa que un reflejo de la sociedad, una manera de asimilar ciertos modelos de conducta externos. "Con amor, con tratamientos adecuados y un enfoque para recuperar nuevos valores, la enfermedad, como ocurre en Estados Unidos, puede remitir". Mientras tanto, mantendr¨¢n la talla 38 con todas sus consecuencias. "Al principio la sociedad respondi¨® a la enfermedad con la represi¨®n. ?No quieres comer? Pues te encarcelamos y te obligamos a ingerir 5.000 calor¨ªas diarias. Y eso es fatal y empeora el problema". "El peso ideal", agregan, "no es una enfermedad, sino un consejo que dan los endocrinos. Los dise?adores tienen amor por ver a las mujeres y a los hombres guapos, les gustan las cosas bonitas. Est¨¢n dolidos de que se les quiera responsabilizar de todo esto. No se debe encubrir la causa con el efecto. Muchas veces lo que hacen las anor¨¦xicas es tapar su enfermedad con trajes. O utilizar el cuerpo como un traje", se?ala Loewe. La reuni¨®n de los creadores de moda se celebr¨® el pasado fin de semana en Granada. Se reunieron en la Casa de los Tiros, con un calor espantoso y una vehemencia verbal no menos fogosa. "Son grandes indivualistas", dijo Loewe, "y es normal". Loewe ha sido el promotor de estas reuniones anuales en Granada. Para el a?o que viene, la asociaci¨®n tiene el prop¨®sito de organiar una exposici¨®n fotografica sobre la moda, que incorporar¨¢ esculturas y elementos corporales.
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