El PSC compite con CiU en pedir ayudas fiscales a las empresas en los presupuestos del Estado

Siguiendo la l¨ªnea marcada por Pasqual Maragall en la batalla por conseguir el apoyo de sectores empresariales a su candidatura a la Generalitat, los socialistas catalanes defender¨¢n en el debate de los presupuestos generales del Estado para el a?o 2000 la introducci¨®n de medidas fiscales para apoyar a las empresas. Los socialistas propondr¨¢n tambi¨¦n enmiendas que en conjunto representar¨ªan, en caso de ser aceptadas, comprometer unos 210.000 millones de pesetas en inversiones del Estado para grandes infraestructuras en Catalu?a durante los pr¨®ximos cinco a?os.

El primer secretario del PSC, Narc¨ªs Serra, critic¨® ayer en Madrid que el Gobierno de Jordi Pujol persista este a?o en "la t¨¦cnica del pellizco" a la hora de negociar con el Gobierno de PP su voto a los presupuestos. Los nacionalistas se han fijado como objetivo conseguir 14.500 millones para mejorar la financiaci¨®n de la polic¨ªa auton¨®mica, unos 2.000 millones para subvencionar la rebaja de peajes de autopistas (mediante la reversi¨®n a Catalu?a del 7% del IVA) y unos 4.000 millones para mejorar la financiaci¨®n de la sanidad. En la propuesta de prioridades de los socialistas catalanes para los presupuestos del Estado del a?o 2000, figura en primer lugar destinar 24.000 millones de pesetas adicionales a Ense?anza para atender la implantaci¨®n de la reforma educativa. En segundo lugar, el PSC propone que en vez de centrar la negociaci¨®n en el porcentaje que le corresponde a Catalu?a del total de inversiones del Estado, como hace CiU, las inversiones se determinen en funci¨®n del plan plurinual a que se comprometi¨® en diciembre de 1998 el ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado. Conexi¨®n del AVE En ese plan deben figurar, seg¨²n detall¨® la diputada socialista Mercedes Aroz, la construcci¨®n del AVE hasta conectar con Francia, incluida la estaci¨®n de la Sagrera; la ampliaci¨®n del aeropuerto de Barcelona; la realizaci¨®n de los proyectos vinculados al F¨°rum 2004; la ampliaci¨®n de los puertos de Tarragona y Barcelona; las obras incluidas en el plan de carreteras que dependen del Estado; las inversiones en el canal Segarra-Garrigues y el plan de las rieras del Maresme; la mejora del aeropuerto de Reus; los convenios del transporte p¨²blico y la vivienda social en Barcelona, y la participaci¨®n del Ministerio de Fomento en el mantenimiento de la Ronda del Litoral. Adem¨¢s de las propuestas estrictamente econ¨®micas, el PSC pretende que los presupuestos 2000 incluyan tambi¨¦n otras de amplio alcance pol¨ªtico. Una de ellas es la supresi¨®n del peaje de la autopista B-30 (Mollet-El Papiol) y transitoriamente, mientras haya obras en la N-340, en los tramos del Altafulla-Vila-seca, ronda de Tarragona, y en la A 2 entre Barcelona y Lleida hasta que entre en servicio el tramo Cervera-Igualada de la N-II. Otra es acelerar la negociaci¨®n para aprobar el proyecto de Carta Municipal de Barcelona. Y una m¨¢s es la propuesta de declaraci¨®n de inter¨¦s general para las obras que deban resolver el d¨¦ficit de agua de Catalu?a, sea el trasvase del Ebro, del R¨®dano o la desalinizaci¨®n. Por ¨²ltimo, pero en esta ocasi¨®n con una significaci¨®n peculiar, porque es la primera vez que lo hacen, los socialistas proponen ayudar fiscalmente a las empresas para impulsar a las que aspiran a internacionalizarse y para incentivar a las que quieran invertir en investigaci¨®n y desarrollo (I+D). El PSC propone que las inversiones destinadas a la internacionalizaci¨®nj sean deducibles en el impuesto de sociedades y que para las empresas que inviertan en I+D el total deducible en este impuesto sea del 50% (el 35% para las actividades de I+D y el 15% para el resto de las deducibles). Serra destac¨® ayer al presentar estas propuestas que llegan en un momento en que pueden ser especialmente importantes,porque la esperanza del PSC es que Maragall sea el presidente de la Generalitat a partir del oto?o y porque CiU "nunca hab¨ªan negociado presupuestos del Estado desde posiciones tan d¨¦biles como las actuales". Serra reiter¨® que Pujol est¨¢ en manos de Aznar desde que "entreg¨® su arma negociadora al anunciar que votar¨ªa los presupuestos del 2000" y desde que perdi¨® el control del calendario electoral. Todo eso hace que CiU y Pujol enfoquen ahora esa negociaci¨®n, afirm¨®, como una oportunidad para arrancar "pellizcos" que den la sensaci¨®n de que han conseguido algo. "Todos sabemos que Aznar tiene cogido a Pujol, porque si CiU no vota el presupuesto, coincidir¨¢n las elecciones generales y las catalanas". Y eso ser¨ªa, dijo, "el fin de Pujol".