Su ¨²ltimo discurso, un elogio de Emma Bonino

No me va a ser f¨¢cil presentar a Emma Bonino porque no necesita de presentaci¨®n y, sobre todo, porque es muy dif¨ªcil resumir en unos breves minutos la potente personalidad de esta ciudadana universal que, desde su admirable potencial socio-humano, sabe emitir, con tenacidad y grandeza, el mensaje de su profunda convicci¨®n de que hay que imponer la cultura de la generosidad y de la tolerancia en la democracia, frente al poder coercitivo de la violencia y de la intolerancia. Nacida en Bra, en el departamento de Tur¨ªn, en marzo de 1948, obtuvo el doctorado en Lenguas en la Universidad Bocconi de Mil¨¢n. A los 27 a?os comienza su activa vida sociopol¨ªtica habiendo sido sucesivamente diputada al Parlamento italiano y miembro del Parlamento Europeo; a los 33 a?os fue elegida presidenta del Grupo Parlamentario del Partido Radical y 10 a?os m¨¢s tarde presidenta del Partido Radical Transnacional, desde cuyo puesto impuls¨® importantes campa?as internacionales, tales como la creaci¨®n de un tribunal para los cr¨ªmenes de guerra en la antigua Yugoslavia y el establecimiento de un tribunal penal permanente en la ONU. Siempre activa, organiz¨® campa?as sobre temas muy sensibles, como el hambre en el mundo, la energ¨ªa nuclear, las drogas y el aborto, teniendo especial resonancia la campa?a denominada Una flor para las mujeres de Kabul, lanzada el D¨ªa Internacional de la Mujer, con el fin de atraer la atenci¨®n mundial ante la situaci¨®n de la mujer afgana bajo el r¨¦gimen talib¨¢n. En el 96 fue elegida europea al a?o por el semanario franc¨¦s La Vie, en el 97 fue galardonada con la Gran Cruz de la Orden de Mayo por el presidente de Argentina, Carlos Menem, y en el 98 recibi¨® el Premio Pr¨ªncipe de Asturias de Cooperaci¨®n Internacional. La referencia que acabo de hacerles de la vida socio-humana y pol¨ªtica de Emma Bonino es excesivamente breve, pero conf¨ªo en que sea suficiente para imaginarla como lo que es: una militante y combatiente activa de la humanidad, y yo dir¨ªa que hasta con vocaci¨®n po¨¦tica, que ve el mundo desde el Sur; esto es, desde las insuficiencias econ¨®micas y desequilibrios sociales, para llevar su voz al Norte con el intento de alcanzar un gran pacto socioecon¨®mico y con ello ir borrando la realidad y el s¨ªmbolo de una sociedad como la nuestra que, con peligrosa frecuencia, da soluciones estrictamente t¨¦cnicas o econ¨®micas a problemas que no lo son. Le pedimos a la se?ora Bonino que viniera a Madrid... como italiana universal, con imaginaci¨®n creativa y rebelde; es decir, como buena y gran mujer mediterr¨¢nea. Pienso que la integraci¨®n y aportaci¨®n mediterr¨¢nea es decisiva en la nueva Europa, porque hay muy pocas ¨¢reas en el mundo que ofrezcan activos de personas, de pueblos y de culturas con tanta densidad de historia f¨¦rtil, complementaria y acumulada. Densidad de historia y sobre todo, insisto, de contenidos culturales, que son la exigencia fundamental, la condici¨®n indispensable, para ser conductor eficaz de la creaci¨®n de una aut¨¦ntica y gran Europa.