Los expertos ponen de relieve las ventajas de la edici¨®n digital
La venta por Internet evita riesgos econ¨®micos
El panorama editorial se ha diversificado enormemente con la llegada al mercado de nuevas tecnolog¨ªas, que ya no son tan nuevas, como comenta el editor digital Jos¨¦ Antonio Mill¨¢n. Desde los soportes locales del tipo del CD Rom o el DVD, a los libros electr¨®nicos recargables en la red, la gama de nuevos productos es interminable. La tecnolog¨ªa actual permite incluso que resulte asequible la edici¨®n de un s¨®lo ejemplar, una nueva v¨ªa que har¨¢ posible que el negocio de los libros de encargo sea una realidad, seg¨²n dijeron ayer varios expertos en Santander.
. El director del Centro de Informaci¨®n Empresarial de ESADE (Escuela Superior de Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresas), Alfons Cornell¨¢, destaca que con esta opci¨®n los costes para el editor ser¨¢n casi nulos, ya que s¨®lo pagar¨¢ la edici¨®n original. Cornell¨¢ critica el conservadurismo de un sector que no se termina de decidir a invertir en estas tecnolog¨ªas, que van a modificar sustancialmente el papel de los editores: su valor ser¨¢ en el futuro situar los contenidos en la red y facilitar el acceso de los usuarios a la localizaci¨®n de estos. Adem¨¢s, la edici¨®n tender¨¢ claramente hacia una alta especializaci¨®n de contenidos y formatos. El director de ESADE expuso ayer estas opiniones en la charla La edici¨®n en soporte electr¨®nico y "on line", que imparti¨® en la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo dentro del seminario El libro, motor de la educaci¨®n.
Un ejemplo muy evidente de estos cambios que se avecinan est¨¢ en la fase de impresi¨®n, puesto que ya existe la tecnolog¨ªa para que resulte rentable editar un s¨®lo ejemplar por encargo. "Los editores deber¨¢n adaptar su funci¨®n. Por ejemplo, con la impresi¨®n bajo demanda se edita el n¨²mero exacto de libros que se venden, de modo que el editor ya no tiene riesgos iniciales", explica Cornella.
El sector es conservador y se esconde tras el ¨¦xito de lo que ya conoce, seg¨²n comenta Cornell¨¢. "El libro adem¨¢s es uno de los objetos m¨¢s antiguos con los que tratamos a diario y a los editores les cuesta mucho entender que hay nuevos modelos de negocio, otras formas generar ingresos", explica, y matiza que el ¨¦xito es a veces peligroso porque frena la capacidad de asumir riegos. "El riesgo es fundamental para llevar adelante proyectos interesantes. Las empresas que no lo asuman pueden perder definitivamente la cuota de mercado, porque esta econom¨ªa va muy r¨¢pido y el que no llega el primero es muy posible que ya no tenga espacio. El ejemplo m¨¢s claro es Microsoft".
Optimismo
El optimismo triunfa, en cualquer caso, y el profesor est¨¢ convencido de que las grandes editoriales espa?olas apostar¨¢n por las tecnolog¨ªas digitales en un par de a?os. "Veremos un cambio muy substancial. Y detr¨¢s de las grandes, vendr¨¢n todas las dem¨¢s". Esa visi¨®n tan positiva la comparte Jos¨¦ Antonio Mill¨¢n, que present¨® en el mismo seminario una charla titulada El editor de libros y la edici¨®n electr¨®nica, acerca de las posibilidades que tienen los editores al incorporar las tecnolog¨ªas digitales a su oferta. "Es l¨®gico que existan reticencias al principio, pero estoy seguro de que comprender¨¢n que es una nueva forma de trabajar a la que se puede sacar mucho rendimiento", asegura Mill¨¢n. Su tesis es que la oferta tradicional en ning¨²n caso contradice a la digital, sino que la complementa. "De la misma forma que pasaron al off-set, aceptar¨¢n en el futuro la tecnolog¨ªa digital", insiste el experto Mill¨¢s.
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