Ra¨ªces flamencas

Cuando Farruquito se subi¨® al escenario de un corral de Triana y se dio una vueltecita por buler¨ªas, las 1.000 personas del p¨²blico se levantaron todas a la vez como si alguien, desde alg¨²n lugar oculto, las controlase, pero fue una reacci¨®n espont¨¢nea. De eso hace dos a?os. Ahora, Juan Manuel Flores Montoya, Farruquito, de 16 a?os, llega a Barcelona con Ra¨ªces flamencas, una espect¨¢culo que estar¨¢ en el teatro Poliorama hasta el 29 de agosto. Este joven sevillano ha heredado el arte familiar. Es hijo de un cantaor gitano, Juan el Moreno, y de una bailaora gitana, Pilar Montoya, una de las hijas de uno de los mejores bailaores gitanos, Antonio Montoya Flores, El Farruco, que muri¨® en 1997 y de quien, seg¨²n los expertos, Farruquito ha heredado su arte para el baile. No se acuerda de cu¨¢ndo empez¨® a bailar. En su casa le dicen que a los tres o cuatro a?os. A pesar de su don, no se siente un ni?o prodigio: "Me lo dice mucha gente, pero es excesivo, yo me siento normal". Juan Manuel le quita importancia a su ¨¦xito, que cree que se debe a la novedad de ser un bailaor tan joven. "Pero yo me alegro mucho, la verdad", aclara. Sea como sea, este adolescente es la cabeza de cartel de un espect¨¢culo flamenco con tres guitarras, cuatro cantaores y seis bailaores -entre los que est¨¢ su madre- que, despu¨¦s de Barcelona, tiene previsto viajar a Madrid, M¨¦xico y quiz¨¢ a Inglaterra. El mundo del flamenco espera mucho de ¨¦l, pero no se siente presionado: "Yo bailo con gusto, con ganas, nada m¨¢s, y por eso estoy tranquilo". Adem¨¢s, est¨¢ el apoyo de su familia. De entre todos los bailaores, ha tomado como ejemplo a su abuelo, de quien dice que es su ¨ªdolo.