Hoteleros de Baleares apoyan una "ecotasa" para turistas

El nuevo Gobierno balear, que preside Francesc Antich, del PSOE, ha logrado un imprevisto apoyo de la derecha econ¨®mica para aplicar uno de los m¨¢ximos objetivos de su programa: la creaci¨®n de un impuesto tur¨ªstico exclusivo para los visitantes vacacionales, un instrumento fiscal in¨¦dito en Espa?a.Los hoteleros de Menorca y Formentera han reclamado al Ejecutivo balear que desarrolle de inmediato la ecotasa, una de las acciones pol¨ªticas m¨¢s novedosas y controvertidas de su programa de centro izquierda, nacionalista y ecologista. Esta opci¨®n impositiva hab¨ªa sido rese?ada en el pacto multipartido de Baleares como una medida posible a medio plazo, pero la pretensi¨®n empresarial puede acelerarla. La iniciativa, reclamada por hombres de negocios de Menorca y Formentera como una f¨®rmula para mejorar la oferta al turismo y controlar la presi¨®n vacacional, est¨¢ a¨²n sin desarrollar ni concretar como proyecto de ley. La propuesta tributaria ha sido usada por el Partido Popular de Baleares como una de las principales armas arrojadizas contra la alternativa gubernamental.

El pronunciamiento de las patronales de las islas menores fractura el discurso del PP, que cuenta, sin embargo, con el apoyo indirecto de la patronal de empresarios de Baleares, los hoteleros de Mallorca y las agencias de viajes. "El PP ya no puede decir que todos los votos de los empresarios son suyos", mantiene el presidente Antich.

Entre 1.000 y 1.500 pesetas

El cobro individual de una cantidad (entre 1.000 y 1.500 pesetas) a quienes visiten las islas -m¨¢s de 10 millones de turistas al a?o para una poblaci¨®n de 800.000 residentes- se plantea como una f¨®rmula de financiaci¨®n suplementaria para las actuaciones de protecci¨®n de la naturaleza, el patrimonio monumental y las infraestructuras culturales."Apoyo hist¨®rico", razona el consejero del Turismo, el socialista Celest¨ª Alomar, al considerar la postura anunciada de manera espont¨¢nea por dirigentes patronales de Menorca, por tradici¨®n sociol¨®gica e historia m¨¢s cercanos a la derecha y contrarios al incremento de la presi¨®n fiscal, aunque sea indirecta y sobre ciudadanos determinados. "Si un turista no puede pagar una tasa de 1.000 o 1.500 pesetas por venir de vacaciones a Baleares, prefiero que no venga", indica el consejero de Hacienda, Joan Mesquida, del PSOE.

La introducci¨®n de este impuesto ha centrado los recientes debates pol¨ªticos desencadenados por el Partido Popular, que ha blandido la citada tasa como una amenaza para la econom¨ªa y estabilidad del modelo balear. La alternativa tur¨ªstica del Gobierno de izquierdas pretende frenar la avalancha de visitantes en verano mediante la potenciaci¨®n del turismo medioambiental, cultural y de cascos hist¨®ricos durante el invierno.