Jorge de Ant¨®n
Compart¨ª con Jorge el tiempo del programa Para vosotros, j¨®venes -yo era el t¨¦cnico de sonido-. Fueron a?os dif¨ªciles, hubo fusilamientos, la dictadura no desaparec¨ªa a pesar de la enorme presi¨®n social y cultural. El programa no solamente tuvo premios, soport¨® enormes presiones, dur¨ªsimas censuras y continuas broncas con los responsables de la Radio Nacional de entonces.De Jorge conoc¨ª, admir¨¦ y aprend¨ª muchas cosas... Aprend¨ª a amar la libertad, la m¨²sica, la vida... y a ser joven. Quiz¨¢ eso era fundamental en Jorge, su permenente juventud, su alegr¨ªa y su cultura, su inmensa cultura.
He sentido una profunda consternaci¨®n y un inmenso dolor al leer su necrol¨®gica. Jorge formaba parte de mi memoria y, por tanto, de mi vida. Imagino que Carlos Tena, Adri¨¢n Vogel, Gonzalo Garc¨ªa-Pelayo, Antonio G¨®mez, Jos¨¦ Antonio Alarc¨®n, Javier Arenas, Jos¨¦ Antonio Mu?oz (tambi¨¦n ausente), Jos¨¦ Ram¨®n Pardo, Jos¨¦ Manuel Rodr¨ªguez y alg¨²n otro habr¨¢n sentido por lo menos lo mismo que yo.
Para vosotros, j¨®venes, Jorge de Ant¨®n debe ser una referencia.-
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