Defectuosa carambola de t¨¦cnicos

Es pronto, sin duda. Necesitan tiempo, naturalmente. Pero los aficionados del Mallorca, Valencia y Atl¨¦tico ya deben estar pregunt¨¢ndose por qu¨¦ se movieron los t¨¦cnicos de donde estaban y qui¨¦n lo empez¨® todo. Existen dudas sobre qui¨¦n entr¨® primero en contacto: si el Atl¨¦tico con Claudio Ranieri o el Valencia con H¨¦ctor C¨²per. El Mallorca, en cambio, se march¨® resignado a Argentina en busca de un supuesto clon de C¨²per: Mario G¨®mez. Los tres est¨¢n pagando la maniobra.El Atl¨¦tico es un desastre, un equipo sin nada detr¨¢s. Sigue tan mal con Ranieri como sin ¨¦l. Se le adivinan defectos de estilo, de t¨¢ctica, de car¨¢cter y hasta de alineaci¨®n. Sin la pelota, los rojiblancos no son la m¨¢quina recuperadora que quiere Ranieri: la presi¨®n se hace sin orden ni determinaci¨®n. Y el bal¨®n tampoco le dura. No quiere Ranieri la pelota, pero tampoco encuentra el consuelo en el equipo de la chispa, la velocidad y el entendimiento para funcionar a toda pastilla. Algunas decisiones contribuyen a la confusi¨®n: Molina pierde el puesto sin motivo a la vista y su sucesor, encima, falla; Ranieri trabaja durante la pretemporada (muy corta y sin partidos) con un sistema y renuncia a ¨¦l al primer contratiempo... Y cuesta entender c¨®mo se apuesta por un once t¨¦cnico (Valer¨®n y Hugo Leal de pivotes, por ejemplo), y se obliga al desprecio del bal¨®n. El Atl¨¦tico aburre, no se tiene ni un gramo de fe, carece de plantilla (la falta de Kiko a¨²n escuece) y de car¨¢cter. Ranieri habla de que el problema es la falta de jugadores con experiencia. Es decir, la misma cantinela de Sacchi un a?o despu¨¦s. Valer¨®n no necesita experiencia para brillar en la selecci¨®n y tampoco es un reci¨¦n llegado. ?Y Chamot? Tiene 30 a?os y pierde los papeles el primero. ?Y Juninho, y Aguilera? Expertos en la grada. La raz¨®n debe ser otra y el Atl¨¦tico necesita encontrarla.

En el Valencia, los mismos jugadores que arrollaron el 26 de junio al Atl¨¦tico en la final de Copa, son incapaces ahora de sacar un solo punto en la Liga. Estos futbolistas, tan felices entonces sin la responsabilidad del control del bal¨®n, con los tres centrales atr¨¢s, los dos carrileros, los tres centrocampistas juntitos y los dos puntas veloces y certeros, pueden empezar a sentir nostalgia de Ranieri (y Ranieri de ellos). Porque no hay que olvidar que Ranieri se desprendi¨® de Sa?b, Ortega, Romario, Marcelinho y Del Solar para perfilar un equipo a su gusto, que no es el de C¨²per, sino m¨¢s bien el opuesto. Para empezar, a C¨²per s¨ª le interesa la pelota. Y, sin embargo, sigue con casi los mismos futbolistas habituados a prescindir de ella. Y en el banco, los m¨¢s dotados para hacer circular el bal¨®n.

El Valencia encaja muchos goles porque la defensa de cuatro adelantada necesita dos centrales r¨¢pidos y s¨®lo tiene uno, Bj?rklund. Para suplir la baja por lesi¨®n de Milla, C¨²per prefiri¨® como medio centro al contundente Albelda antes que al estilista Gerard, y el equipo no domina el juego. Los interiores tampoco funcionan: Angulo, por sus limitaciones para centrar; Mendieta, por su tendencia a marcharse al centro. Farin¨®s se apag¨® y ?scar no juega. En la delantera, el Piojo tiene poco alimento: C¨²per redujo los despejes orientados y se le acab¨® el chollo a su formidable velocidad. Por otro lado, S¨¢nchez le ha arrebatado el puesto al desganado pero genial Ilie, y por ah¨ª el grupo pierde talento.

El Mallorca de G¨®mez tampoco es el que dej¨® C¨²per en junio. Se ha vuelto un equipo previsible. Y an¨¢rquico: jugadores en bajo de estado de forma, fichajes bajo sospecha y un t¨¦cnico que, seg¨²n el Comit¨¦ de Entrenadores, no re¨²ne los requisitos legales para dirigir en Espa?a. El Mallorca est¨¢ fallando en lo que hasta hace muy poco tiempo era su punto m¨¢s s¨®lido: el manejo de los resultados cortos.

El balance de G¨®mez es desolador: el Mallorca est¨¢ eliminado de la Liga de Campeones y ocupa un puesto de descenso directo en la Liga. Los nervios empiezan a atenazar a jugadores clave, como el argentino Siviero, el yugoslavo Stankovic y el camerun¨¦s Lauren. Tampoco se escapa el meta internacional argentino Mono Burgos, que ha creado un conflicto interno al calificar de "inepto" al m¨¦dico de la entidad, Joan Roig, porque, seg¨²n explic¨®, no supo diagnosticarle una lesi¨®n. Sobre G¨®mez ya pesa la amenaza del despido si no gana en la pr¨®xima jornada al Numancia.