El nuevo bachillerato cierra la implantaci¨®n de la reforma

El Gobierno de Jordi Pujol acaba su legislatura habiendo conseguido la implantaci¨®n pr¨¢cticamente total de la reforma educativa en Catalu?a. El 97,7% de los alumnos que iniciar¨¢n pasado ma?ana el curso escolar lo har¨¢n bajo los criterios de la LOGSE. Se generaliza el 4? de ESO, los dos cursos del nuevo bachillerato y la nueva formaci¨®n profesional. S¨®lo faltan por implantar algunos ciclos formativos de grado superior y las ense?anzas musicales y art¨ªsticas.

Persiste el impacto del descenso demogr¨¢fico, aunque con menor intensidad que en los dos ¨²ltimos a?os. Son 1.001.479 los escolarizados (18.015 menos que el a?o pasado) en los 2.322 centros p¨²blicos y 1.448 privados concertados que hay en Catalu?a. La valoraci¨®n general de la gesti¨®n del departamento de Ense?anza de la Generalitat, en funci¨®n de su objetivo pol¨ªtico de implantar lo m¨¢s r¨¢pidamente posible la reforma educativa, es positiva. La Administraci¨®n catalana ha conseguido transformar totalmente un sistema escolar de considerables dimensiones (m¨¢s de un mill¨®n de alumnos) en un plazo relativamente breve. Esta din¨¢mica, sin embargo, ha incidido negativamente en el funcionamiento de muchos centros, especialmente de secundaria, ha creado un profundo malestar entre el profesorado y est¨¢ propiciando, especialmente en determinadas zonas de las grandes ciudades, un deterioro de la ense?anza p¨²blica en favor de la privada concertada, que en Catalu?a ocupa, en muchos casos, especialmente en Barcelona, la mitad de la oferta.

La principal queja de los profesores se centra en los problemas que ha tra¨ªdo la reforma al forzar la convivencia en la misma aula de alumnos con perfiles muy diferenciados. La atenci¨®n a la diversidad, el eufemismo introducido por la LOGSE para paliar este problema, empieza a abrirse paso en la mentalidad de la Administraci¨®n educativa, pero, de momento, con escasa incidencia. El consejero Xavier Hern¨¢ndez explic¨® que este curso habr¨¢ 211 unidades de adaptaci¨®n curricular, 32 unidades externas de escolarizaci¨®n y 41 talleres de adaptaci¨®n escolar.

Guetos escolares

La acumulaci¨®n de alumnos procedentes de la inmigraci¨®n o de situaciones socioecon¨®micas precarias en determinados centros p¨²blicos, que se configuran como guetos escolares, es otro de los problemas que siguen sin resolverse. En determinadas zonas ha sido necesario un acuerdo municipal para repartir a estos alumnos en los diferentes centros y evitar que se acumularan en uno solo de ellos. De nuevo, en este aspecto, la privada concertada se beneficia de la situaci¨®n. En Catalu?a hay 21.074 alumnos extranjeros, pero esta cifra no refleja la situaci¨®n real. El propio Hern¨¢ndez reconoci¨® que "suelen tener m¨¢s problemas los hijos de familias con una dif¨ªcil situaci¨®n econ¨®mica, y son ellos los que necesitan de una pol¨ªtica de integraci¨®n". Aunque, en su opini¨®n, "se trata de un colectivo peque?o" que no justifica "el reparto forzado", porque "ser¨ªa contrario a la ley y nos plantear¨ªa problemas ¨¦ticos serios".

Las cuantiosas inversiones en infraestructuras para adaptar los centros escolares a la reforma han ido en paralelo con recortes de los gastos de funcionamiento, lo que ha incrementado el malestar en los centros. Para este inicio de curso se han invertido 20.000 millones, con los que se han financiado 24 nuevas construcciones, 12 rehabilitaciones y grandes ampliaciones de centros y 694 obras menores.

Sin embargo, no se ha podido acabar con la existencia de los barracones prefabricados en los centros de secundaria. Todav¨ªa, unos 19.000 alumnos, el 3% del total del alumnado, seg¨²n reconoci¨® Hern¨¢ndez, estudian en la provisionalidad.