Gaviria narra en un filme la vida sin futuro de los ni?os de Medell¨ªn

Es una pel¨ªcula dura y nada convencional. Bastante pr¨®xima al documental e inspirada en Los olvidados, de Bu?uel, la pel¨ªcula La vendedora de rosas, del colombiano V¨ªctor Gaviria, nacido en Medell¨ªn en 1955, narra la dif¨ªcil y ag¨®nica vida de los ni?os de la calle (los pelaos) de su ciudad. El director arm¨® la pel¨ªcula con actores no profesionales, algunos de los cuales, desde que se rod¨® en 1996, han fallecido.La vendedora de rosas recrea las ¨²ltimas 24 horas de la ni?a M¨®nica (interpretada por Leidi Tabares) en una ciudad dantesca en donde miles de ni?os juegan con la muerte esnifando pegamento (y cuando pueden coca¨ªna) y arriesgando su vida por unos pocos pesos. Aun as¨ª y en medio de ese "no futuro", como lo califica Gaviria, la protagonista lucha por agarrarse a la vida sin traicionarse a s¨ª misma y recorre alucinada las calles dantescas de Medell¨ªn a la b¨²squeda de una esperanza.

"Estos ni?os de la calle son una lecci¨®n de rebeld¨ªa y sobre todo de vitalidad. No tienen nada y a pesar de ello siempre est¨¢n buscando algo, y ¨¦se ya es un punto de partida", declar¨® ayer el director en la presentaci¨®n de la pel¨ªcula en Madrid. Gaviria neg¨® que la pel¨ªcula le haya nacido del pesimismo. La necesidad dicta la dramaturgia y las pel¨ªculas son una forma de esperanza para el director, si no no las rodar¨ªa. "En una realidad donde todo el mundo est¨¢ en guerra con los dem¨¢s, el ¨²nico para¨ªso es estar conversando con alguien, por eso en esta pel¨ªcula hay mucha esperanza. La solidaridad, el amor... hay que buscarlos en otro lugar, no en el bienestar, que no es ning¨²n humanismo".

Riesgos

El director tuvo la sensaci¨®n durante las 16 semanas de rodaje de que la pel¨ªcula se iba a romper en cualquier momento por un acto violento. Porque trabajar con ni?os de la calle, a los que Gaviria capt¨® a trav¨¦s de una mujer que hab¨ªa vivido el mismo pasado, entra?aba riesgos. "El secreto estuvo en que ninguno de los actores se vio traicionado en el gui¨®n, que es una especie de recolecci¨®n de la vida de estos ni?os. Incluso al finalizar el rodaje los mantuvimos unos meses en las oficinas para que su tr¨¢nsito a la calle fuera menos duro", dijo el director.Muy premiada, pero poco valorada por los que se encargan de las ventas, La vendedora de rosas ha tenido una distribuci¨®n malograda. Candidata en 1998 a la Palma de Oro en Cannes, ganadora de siete premios en el Festival de La Habana, mejor pel¨ªcula en el Festival de Denver (EEUU) y galardonada en la mayor¨ªa de los festivales de cine latinoamericanos, s¨®lo se ha estrenado en Colombia y ahora en Espa?a (en Barcelona el d¨ªa 17 y en Madrid el 24, distribuida por Nirvana). "Hacer cine en Colombia es un riesgo, pero tambi¨¦n una enunciaci¨®n", declar¨® Gaviria, tambi¨¦n poeta. Su pr¨®ximo proyecto es contar una historia sobre los efectos del narcotr¨¢fico en las clases altas de Colombia. Esa clase que crey¨® que el narcotr¨¢fico no ten¨ªa consecuencias y hoy les golpea por todos los costados, a juicio de Gaviria.