El Valladolid saca el fruto de sus figuras

El Valladolid ya cree. Cree en sus posibilidades pero sobre todo cree en los buenos futbolistas, que ayer fueron los que sacaron el partido de la mediocridad, de los choques y convirti¨® en intrascendentes los esfuerzos meramente f¨ªsicos que hacen del f¨²tbol algo aburrido. Rodrigo, Eusebio y V¨ªctor pusieron en el c¨¦sped todo lo bueno que hubo en ¨¦l y decidieron que este a?o el Valladolid merece ser visto. El M¨¢laga lo hizo todo bien pero le superaron los momentos m¨¢s brillantes del equipo de Manzano. Defendi¨® el equipo con correcci¨®n, atac¨® cuando ten¨ªa que hacerlo, se adelant¨® en el marcador y empat¨® cuando iba por detr¨¢s, pero los latigazos de brillantez del Valladolid fueron demasiado para el cuadro de Peir¨®. El choque exhibi¨® todos sus signos en el primer cuarto de hora. Toda la seriedad futbol¨ªstica era del M¨¢laga, mientras que al Valladolid lo ¨²nico que le quedaba era pasar de la mediocridad a la brillantez con la misma velocidad con la que su defensa comenz¨® a complicarse la vida. As¨ª, en el minuto 7, Rojas puso el bal¨®n en la cabeza de Catanha al que no le qued¨® m¨¢s remedio que marcar vista la pasividad de los centrales vallisoletanos. Al M¨¢laga la situaci¨®n le ven¨ªa al pelo, porque adem¨¢s de tener en frente un equipo sin te¨®rica capacidad de reacci¨®n, el partido se met¨ªa en un sin sentido que convert¨ªa en dominadores a los de Peir¨®.Pero el Valladolid se ha encontrado esta temporada con un jugadorazo, Rodrigo, que ha invertido la trayectoria de su equipo. Ayer el jugador brasile?o comenz¨® a equilibrar el partido con una buena jugada que Roteta convirti¨® en el empate en su propia porter¨ªa. Despu¨¦s, en el inicio de la segunda parte, cambiado de banda, retorci¨® a toda la defensa malague?a para conseguir el segundo con sus propias botas. Para colmo de males del M¨¢laga, mediada la segunda parte, apareci¨® Eusebio. Ocurri¨® cuando el M¨¢laga hab¨ªa conseguido igualar el choque en otra estupidez compartida de los centrales y el portero.

El Valladolid que por primera vez se hab¨ªa exhibido como un conjunto s¨®lido, regresaba al nerviosismo, casi a la histeria, y pon¨ªa en peligro todo lo bueno que hab¨ªa hecho hasta entonces. Pero eusebio envi¨® dos pases, mejor dos medio goles a V¨ªctorque puso sin problemas la mitad que faltaba para que el Valladolid certificase su mejor partido de la era Manzano. De paso frenaba a un M¨¢laga que est¨¢ teniendo un m¨¢s que aceptable reencuentro con la Primera Divisi¨®n despu¨¦s de un largo peregrinaje por las categorias inferiores.