Una explosi¨®n pirot¨¦cnica mata a un joven y da?a 12 casas en Catarroja
La deflagraci¨®n hiri¨® de gravedad a siete personas y redujo a escombros dos edificios
Un grupo de j¨®venes que participaba en las fiestas de El Cristo en Catarroja (Valencia) lanzando material pirot¨¦cnico en la calle provoc¨® ayer involuntariamente una gran explosi¨®n, al estallar la p¨®lvora que portaban en un carrito de supermercado. La deflagraci¨®n caus¨® la muerte a una persona, hiri¨® a siete y provoc¨® graves destrozos en 12 edificios. Algunos testigos insisten en que uno de los petardos (una carcassa) rebot¨® en un tejado y cay¨® sobre el resto.
Otros apuntan que uno de los clavarios de El Cristo (nombre de los organizadores e integrantes de esta fiesta) iba fumando y pudo provocar en un descuido la explosi¨®n.El grupo estaba realizando la despert¨¤, acto basado en lanzar un ej¨¦rcito de petardos a primera hora de la ma?ana. Varios vecinos del pueblo empezaban a quejarse del desproporcionado ruido de las detonaciones. No era para menos: seg¨²n algunos restos, parece que el carrito almacenaba tronaors y carcasses, material pirot¨¦cnico del m¨¢s potente, delicado y peligroso. En el caso de las carcasses, son la baza fuerte de las mascletaes falleras.
Cuando los amigos se encontraban en el tramo medio de la c¨¦ntrica calle Col¨®n, caracter¨ªstica por sus casas de altura baja, la dependienta de una carnicer¨ªa que estaba prepar¨¢ndose para trabajar les previno sobre la peligrosidad de esos petardos. La mujer coment¨® que los j¨®venes iban muy alegres, "como bebidos".
Poco despu¨¦s, a las 9.45 de la ma?ana, se produjo la explosi¨®n, que se expandir¨ªa en forma de uve. "Fue tan fuerte que cre¨ªamos que era un coche bomba", dijo un vecino. Lo primero que recuerdan los testigos es "una nube tan negra que no se ve¨ªa nada". En cuanto se disip¨®, una escena de horror: los j¨®venes estaban retorci¨¦ndose en tierra, quemados y heridos. Dos casas se vieron tan afectadas por el impacto que se les ha declarado en situaci¨®n de "ruina total". Una de sus habitantes acab¨® con seis costillas rotas y su marido lleno de cortes por los cristales rotos.
El horno y la carnicer¨ªa de la calle aparecieron destrozados, y uno de los dependientes con un ojo pulverizado. Hasta 12 casas se vieron muy da?adas por la explosi¨®n y cuatro de ellas deber¨¢n demolerse al quedar quebrados sus pilares de carga .
La atenci¨®n m¨¦dica, los bomberos, la polic¨ªa y protecci¨®n civil llegaron de inmediato. Los heridos (siete, seg¨²n la polic¨ªa local) fueron trasladados a distintos centros. Uno de los ingresados en el Hospital La Fe, Sergio Garc¨ªa, de 17 a?os, muri¨® a primeras horas de la tarde a causa de una gran contusi¨®n pulmonar. Su hermano Jorge, de poco m¨¢s de 20, se encontraba en estado muy grave, con quemaduras en el 80% de su cuerpo. A final del d¨ªa, tres clavarios hab¨ªan sido dados de alta.
A lo largo de la jornada, el director general de Interior, Fernando Coquillat y otras autoridades pasaron por Catarroja. Su alcalde, Francisco Chirivella mantuvo una reuni¨®n con los vecinos que se hab¨ªan quedado sin vivienda. Se habilit¨® para ellos un hotel en Cullera, lejos de Catarroja (el Mundial de Motociclismo hab¨ªa agotado otras plazas). El Consistorio planea facilitar cr¨¦ditos para la reconstrucci¨®n de las viviendas.
Te¨®ricamente, la organizaci¨®n de las fiestas de El Cristo debe tener un seguro por empleo de material pirot¨¦cnico. No es la primera vez que una de sus celebraciones con petardos tiene consecuencias. Fuentes del Ayuntamiento comentaron que hace a?os ya sucedi¨® algo similar, aunque con da?os bastante menores y limitados a materiales.
La polic¨ªa judicial se encarga de la investigaci¨®n que debe determinar las causas del accidente y depurar responsabilidades. Algunas informaciones apuntan que la cantidad de p¨®lvora que conten¨ªa el carrito de los heridos multiplicaba ampliamente el l¨ªmite legal.
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