Tortugas moras de C¨®rdoba
La Delegaci¨®n del Gobierno de la Junta en C¨®rdoba fue testigo ayer de un hecho hasta ahora ins¨®lito: la presentaci¨®n en sociedad de 23 tortugas moras, especie en peligro de extinci¨®n. Si curiosas son las protagonistas del acto, a¨²n los es m¨¢s su procedencia. Una pizca de persuasi¨®n y un mucho de presi¨®n por parte de los agentes de la Delegaci¨®n Provincial de Medio Ambiente lograron de un vecino de C¨®rdoba la entrega de los animales, criados por ¨¦ste en su propia casa. El origen de las tortugas se remonta a 1984, a?o en el que su ex propietario viaj¨® a Marruecos, trayendo de vuelta tres ejemplares de este animal. Desde entonces, y hasta el descubrimiento de su existencia por parte de los agentes de Medio Ambiente, las tortugas han vivido en su domicilio. Y no s¨®lo eso. Despu¨¦s de 12 a?os de intentos fallidos, llegaron las primeras cr¨ªas, a las que sucedieron varias puestas m¨¢s de huevos. En total, tres nidadas distintas con el resultado de 20 nuevos ejemplares de tortuga, seg¨²n explic¨® ayer el delegado de Medio Ambiente, Andr¨¦s Herrera, quien se neg¨® a facilitar la identidad del criador de los animales, ya que, seg¨²n dijo, ¨¦ste hab¨ªa pedido permanecer en el anonimato. Si en un primer momento Herrera present¨® la entrega de las tortugas como una donaci¨®n desinteresada en benefici¨® de la ciencia, luego hubo de reconocer que no hab¨ªa sido f¨¢cil conseguir que su propietario se desprendiera de los animales. Los contactos con criador se limitaron a varias conversaciones telef¨®nicas, fruto de las cuales, el pasado 15 de septiembre, ¨¦ste hizo llegar los animales a trav¨¦s de un intermediario al Centro de Recuperaci¨®n de Especies Protegidas Los Villares, propiedad de Medio Ambiente. S¨®lo la apelaci¨®n a las leyes y el conocer que la simple posesi¨®n de la especie est¨¢ penalizada, hicieron desistir al due?o de su inter¨¦s por mantener a los animales en casa, no sin antes intentar la negociaci¨®n: qued¨¢ndose varios ejemplares y cediendo el resto a la Junta de Andaluc¨ªa. Acerca del propietario, el delegado s¨®lo accedi¨® entre risas a dar una pista, aunque importante eso s¨ª, su casa est¨¢ en el campo por lo que dispone de jard¨ªn. Seg¨²n explic¨® Herrera, que no tuvo reparos en jugar con los animales y cogerlos para mostrarlos a la prensa, la tortuga mora, oriunda del norte de ?frica, es una especie en peligro de extinci¨®n de la que hay escasos ejemplares en la pen¨ªnsula Ib¨¦rica. En Andaluc¨ªa, se pueden encontrar a algunas de estas tortugas en el coto de Do?ana y en algunas zonas de la costa de Almer¨ªa. Tras detallar las bondades y la rareza de esta especie, Herrera elogi¨® la tarea de su criador, ya que la reproducci¨®n en cautividad de estos animales est¨¢ considerada por los expertos como de una gran dificultad. Por si no fuera suficiente m¨¦rito, el delegado explic¨® la sorpresa de los t¨¦cnicos al conocer que la cr¨ªa se hab¨ªa llevado a cabo en C¨®rdoba, ciudad en la que se registran periodos fr¨ªos ajenos al lugar de procedencia de la especie, lo que dificulta a¨²n m¨¢s los posibles apareamientos. Pese a la p¨¦rdida de las tortugas, no todo son malas noticias para su antiguo propietario. Tras plantearse por los periodistas la posibilidad de que Medio Ambiente contrate al criador, Herrera admiti¨® que se le ha invitado a que comparta sus conocimientos con los cuidadores e investigadores del centro de cr¨ªa en cautividad de Almer¨ªa, especializado en estas especies y destino final de las tortugas. Por ahora, el propietario no ha contestado.
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