El AVE enfrenta a Cuenca y Albacete a alta velocidad

El camino m¨¢s corto para unir dos puntos no siempre es la l¨ªnea recta sino el consenso. El socialista Jos¨¦ Bono, presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, ha tenido que retocar el conocido aforismo geogr¨¢fico para intentar acallar los tambores de guerra que han sonado en Cuenca y Albacete a prop¨®sito del trazado del tren de alta velocidad (AVE) Madrid-Valencia. Las dos ciudades est¨¢n enfrentadas para exigir que ese futuro tren "pase y pare" por ellas: Cuenca (44.000 habitantes) lo reclama por una cuesti¨®n de supervivencia y Albacete (128.000 vecinos), para consolidar su condici¨®n de capital econ¨®mica de Castilla-La Mancha. Bono acaba de presentar en el Ministerio de Fomento el llamado "trazado integral del AVE" que, en principio, colma las aspiraciones de ambas ciudades, cuyos vecinos pueden convertirse en cualquier momento, a poco que se les pregunte, en improvisados ingenieros capaces de dise?ar itinerarios y calcular costes sobre una servilleta.La pugna entre ambas ciudades se ven¨ªa fraguando desde tiempo atr¨¢s, especialmente en Cuenca, donde la ciudadan¨ªa est¨¢ soliviantada desde que el trazado de la autov¨ªa Madrid-Valencia los dej¨® de lado en beneficio de Albacete. La disputa, no obstante, se dispar¨® cuando se conocieron los tres primeros trazados de la l¨ªnea AVE entre Madrid y Valencia.

Cuenca apuesta a deg¨¹ello por el llamado trazado Norte, que atravesaba la ciudad, Patrimonio de la Humanidad, para seguir luego rumbo a Valencia desde Motilla del Palancar. Su lema, escrito en los carteles colgados en cientos de casas y comercios conquenses, es AVE por Cuenca, por derecho. La l¨ªnea Norte conecta la ciudad con Albacete, pero con un ramal, una opci¨®n que esta ¨²ltima ciudad se niega a aceptar.

Los albacete?os, en cambio, se desviven por el recorrido Sur, que mantendr¨ªa a la ciudad como el eje de todo el tr¨¢fico entre Madrid y Valencia, Alicante y Murcia. Su lema, que tapiza los balcones de la ciudad, es ¨¦ste: Madrid-Albacete-Valencia, el AVE que queremos. Por supuesto que el trazado centro que propone el presidente de la Comunidad Valenciana, Eduardo Zaplana, no lo quieren ni ver porque margina a ambas ciudades para optar por el camino m¨¢s corto.

A Cuenca, a d¨ªa de hoy, s¨®lo se puede llegar por tortuosas carreteras y por una v¨ªa f¨¦rrea abierta hace 110 a?os, que enlaza Madrid con Valencia en seis horas. Albacete, sin embargo, tiene autov¨ªas y los trenes Alaris de velocidad alta (no alta velocidad, que aunque parezca lo mismo, no lo es), con 20 circulaciones diarias que lo unen con Madrid y Valencia.

Pugna ciudadana

"Que quede claro: esto no es una cuesti¨®n de Villarriba y Villabajo", subraya el cardi¨®logo Antonio Melero, portavoz de la Plataforma C¨ªvica por Cuenca, la entidad que reclama que el AVE beneficie a la ciudad. Melero est¨¢ empe?ado en refutar que el enfrentamiento con Albacete es una catetada provincianista. "Es una cuesti¨®n de sentido com¨²n contra irracionalidad, porque nuestra propuesta a todos beneficia", insiste."Tampoco nosotros tenemos nada contra Cuenca, pero estamos convencidos de que el ¨²nico trazado v¨¢lido es el que mantiene a Albacete como nudo de conexi¨®n del centro con el Levante espa?ol desde 1855. S¨®lo pedimos lo nuestro", contesta Jos¨¦ Luis Garc¨ªa Navarro, vicepresidente de la C¨¢mara de Comercio albacete?a y presidente de la Asociaci¨®n de Empresarios Campollano (Adeca), principal defensor de la opci¨®n albacete?a y que cuenta con el apoyo de 35.000 firmas. "No nos fiamos de que nos dejen s¨®lo como un ramal, porque perder¨ªamos el 50% del transporte ferroviario y la condici¨®n de nudo ferroviario", agrega.

Ambos representantes se replican aqu¨ª de forma figurada porque hasta ahora ni la Plataforma C¨ªvica por Cuenca ni la llamada Mesa Unitaria del AVE de Albacete se han puesto en contacto para acercar posturas. Ahora es m¨¢s que posible que en breve haya una reuni¨®n entre ambos, ya que el viernes la Mesa vio con buenos ojos el trazado Integral dise?ado por la Junta. "En la propuesta integral, Albacete no perder¨ªa su condici¨®n de nudo de comunicaciones y favorece el consenso. Y lo decimos ahora, al ver el proyecto, porque antes cre¨ªamos que era un farol", explica Jos¨¦ Mar¨ªa Roncero, portavoz de la Mesa y presidente de la Uni¨®n de Consumidores de Albacete.

El proyecto defendido por Bono plantea un trazado de 481 kil¨®metros, que arrancar¨ªa en Madrid por las v¨ªas del AVE Madrid-Barcelona, torcer¨ªa por Alcal¨¢ de Henares para enlazar con Cuenca. Luego girar¨ªa hacia Albacete, desde donde se abrir¨ªa un tridente hacia Valencia -objetivo principal, al que se llegar¨ªa en una hora y 48 minutos- Alicante y Murcia. Este trazado costar¨ªa, seg¨²n la Junta, 541.767 millones, con un c¨¢lculo de viajeros anual de algo m¨¢s de nueve millones.

El alcalde conquense, el socialista Jos¨¦ Manuel Mart¨ªnez Cenzano, est¨¢ convencido de que su ciudad ganar¨¢ el AVE. "Ya hemos conseguido que el trazado que pase por aqu¨ª entre en Fomento y salga a exposici¨®n p¨²blica con los dem¨¢s, aunque estamos convencidos de que tenemos el as que nos permitir¨¢ ganar", argumenta. Mart¨ªnez Cenzano coincide con sus conciudadanos en que el tren de alta velocidad es una cuesti¨®n de supervivencia para una ciudad que se siente retratada en un op¨²sculo definitorio: El libro negro de la marginaci¨®n de Cuenca.

Lucha radical

"Mira si estaremos mal, sin industria ni proyecci¨®n tur¨ªstica pese a ser Patrimonio de la Humanidad, que el simple hecho de que el AVE llegase a Cuenca convertir¨ªa al tren en la principal industria de la zona", explica el abogado Jos¨¦ Tribes, gerente de la Agrupaci¨®n Provincial de Hosteler¨ªa y Turismo. Tribes y Melly P¨¦rez, un ortopeda miembro de la Plataforma, dan voz a las propuestas m¨¢s radicales que se han o¨ªdo en Cuenca para el caso de que, finalmente, se quede fuera del AVE. "Nos hemos llegado a plantear crear un partido independentista y sacar a Cuenca de Castilla-La Mancha e incluso hay piquetes que est¨¢n dispuestos a volar el trasvase Tajo-Segura si finalmente, por culpa de la presi¨®n de Murcia para que el AVE pase por Albacete y no por aqu¨ª, nos volvemos a quedar marginados", coinciden ambos.Y es que entre Cuenca y Albacete existe un n¨ªtido recelo, mucho m¨¢s acentuado en la primera. "Si es que los de Albacete nos lo han quitado todo: la autov¨ªa, la universidad y ahora quieren el AVE. Ellos tienen industria y dinero, y aqu¨ª vivimos en una econom¨ªa de trueque y subsistencia tal, que la mayor empresa de la ciudad es el hospital, que da trabajo a 800 personas", asegura Jes¨²s L¨®pez, encargado del restaurante conquense Togar.

La unanimidad y visceralidad de Cuenca contrasta con el debate abierto en Albacete donde a cualquiera que se le pregunta se apresura a decir que no tiene nada contra los conquenses, a quienes, en caso de quedar fuera, habr¨ªa que compensar. El jueves, durante el debate posterior a una conferencia sobre el AVE en el Ateneo Albacete, pudo verse la divisi¨®n de opiniones que ha creado la propuesta de Bono en su propio partido, en el PP y en la ciudadan¨ªa. Y todo esto por un debate en el que ni Albacete ni Cuenca tienen la ¨²ltima palabra. Fomento decide.