Los vecinos de Alfonso XIII recurren contra la construcci¨®n de 196 pisos junto a sus chal¨¦s

Defender el barrio hasta llegar a los tribunales. Ese objetivo se han marcado los vecinos de las 150 casas unifamiliares de la colonia de Alfonso XIII. Se oponen a la construcci¨®n de las 196 viviendas, casi finalizadas, que el Ayuntamiento ha autorizado en el solar de la antigua f¨¢brica Bressel, ubicada entre la colonia y la zona de Santamarca. Los residentes disconformes denuncian que en los nuevos bloques habr¨¢ 140 viviendas por hect¨¢rea frente a las 13 del ¨¢rea de los chal¨¦s y las 90 de Santamarca. Por eso han recurrido contra el planeamiento urban¨ªstico municipal.

Los vecinos, que echan en falta una zona de transici¨®n, han presentado recursos ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid contra el vigente Plan General de Ordenaci¨®n Urbana y contra el estudio de detalle. Los residentes reclaman al Ayuntamiento un plan especial para la zona.Pedro Pinto, arquitecto y vocal de la Asociaci¨®n de Vecinos La Luz, de la antigua colonia Uni¨®n El¨¦ctrica, hoy conocida como de Alfonso XIII (Chamart¨ªn), considera "un disparate" que el Ayuntamiento haya autorizado tantas viviendas.

El gerente municipal de Urbanismo, Luis Armada, defiende la legalidad del proyecto: "Se opt¨® por mantener la misma edificabilidad de la f¨¢brica y darle un uso residencial. Dado que la constructora decidi¨® distribuir los bloques de viviendas de otra manera, la forma oportuna para hacerlo era mediante un estudio de detalle." Armada asegura que el volumen de edificaci¨®n y el uso son los establecidos por el Plan General y concluye: "Tengo la certeza de que la resoluci¨®n de todos los recursos presentados va a dar la raz¨®n al Ayuntamiento de Madrid".

Quiebra de PSV

Las explicaciones de Armada no convencen a los vecinos, que inciden en la necesidad de un plan especial para la zona. Recuerdan los distintos tratamientos municipales a la vieja f¨¢brica de instrumentos de precisi¨®n, que, al cerrar, pas¨® a ser propiedad de la cooperativa IGS-PSV, vinculada a UGT. "Los de PSV consiguieron una licencia para construir 81 viviendas entre pisos y chalets. Tras la quiebra de la cooperativa, en diciembre de 1993, el Instituto de Cr¨¦dito Oficial (ICO) se qued¨® con la finca, que posteriormente pas¨® a manos de Argentaria. Una inmobiliaria vinculada a este banco, Unitaria Pinar, es la que promueve los bloques", explica Pinto."En noviembre de 1996, antes de la aprobaci¨®n definitiva del actual Plan General (abril 1997), y cuando todav¨ªa no se hab¨ªan resuelto las alegaciones, ya estaban vendiendo pisos", a?ade Pinto, mientras muestra un folleto de la promotora en el que consta la primera fecha citada. "Empezaron a vender sin licencia. Usaban la obtenida por PSV para un proyecto diferente", agrega Jaime Murillo, abogado de la comunidad de propietarios de la manzana de V¨ªctor de la Serna, 32 a 42. Este grupo de cien viviendas se ha sumado al pleito de los vecinos de los chal¨¦s contra los nuevos bloques.

Olga S¨¢nchez, responsable comercial de Unitaria Pinar, gestora de la comunidad de propietarios de Residencial Bresalia, asegura que en 1996 no vend¨ªan pisos, sino que lo que hac¨ªan era captar personas para esa futura comunidad de propietarios.

Pinto resalta que en el vigente plan de 1997 contin¨²a la protecci¨®n de la colonia de planes anteriores, pero "no hay protecci¨®n del entorno". En cuanto a la finca Bressel, dice: "No era suelo industrial, quiz¨¢s lo fue en la posguerra, pero desde 1950 no es industrial, es zona unifamiliar. En el Plan General de 1964 sigue siendo zona para viviendas unifamiliares. En las ordenanzas municipales de 1972 toda la zona sigue dedicada a vivienda unifamiliar. El plan de 1985 segrega de la colonia la f¨¢brica y la pone en el ¨¢mbito de Santamarca como mantenimiento de edificaci¨®n, con la idea rom¨¢ntica de Eduardo Mangada, entonces consejero de Ordenaci¨®n del Territorio, de mantener los edificios y rellenarlos por dentro". A pesar de esta segregaci¨®n, matiza, "no var¨ªa el tipo de uso de la finca".

Pinto y Murillo explican que la colonia va a soportar una sobrecarga no prevista en su urbanizaci¨®n, una parte de la cual costearon los propios vecinos en tiempos del mandato municipal de Tierno Galv¨¢n.

Ya en las alegaciones y en el recurso del Plan General, los vecinos expusieron que al tratarse de una reforma urbana, es decir, al cambiar el uso de industrial a residencial, necesitaba otro tratamiento que no fuera simplemente el de un estudio de detalle. "Reclam¨¢bamos un plan especial de reforma interior, una especie de estudio para ver las necesidades sociales de la nueva poblaci¨®n que se asienta ah¨ª", dice Pinto.

A pesar de las alegaciones presentadas al estudio de detalle, ¨¦ste fue aprobado. Pinto explica que presentaron el recurso correspondiente, y el pasado 9 de septiembre formalizaron la demanda contra el estudio de detalle. Esta demanda se apoya principalmente en que mantienen que no es correcta la norma aplicada para sustituir la edificaci¨®n existente. Seg¨²n los vecinos, para los promotores, y por tanto, Gerencia de Urbanismo, que lo ha aprobado, se trata de una edificaci¨®n industrial, pero los demandantes insisten en que era ilegal, puesto que la zona estaba definida como residencial unifamiliar. "Era una industria edificada contra planeamiento y mantenida fuera de ordenaci¨®n y contra ley y no genera, por tanto, el derecho de sustituci¨®n de edificios", explica Pinto.

A su preocupaci¨®n por la sobrecarga viaria para las estrechas calles de esta colonia, construida en los a?os veinte, y el problema de los accesos, Jos¨¦ Manuel Astorga, presidente de la asociaci¨®n de vecinos La Luz, a?ade su lamento por el da?o causado a la magn¨ªfica arboleda de la finca y el temor de que desaparezca del todo.

Otra de las quejas de Astorga es la celeridad con que han llevado a cabo las obras. "Han trabajado los s¨¢bados desde las siete de la ma?ana. Est¨¢ claro que quieren terminar cuanto antes y que van a una pol¨ªtica de hechos consumados por si prosperan los recursos", explica. Carlos Feio, director de la promotora, asegura que han trabajado algunos s¨¢bados porque "los trabajos de hormigonado requieren una continuidad".