Los expertos reclaman una mayor eficacia en la gesti¨®n de la financiaci¨®n educativa

La educaci¨®n debe ser una prioridad de todos los pa¨ªses, aunque por motivos diferentes. En esto coinciden todos los expertos. Mientras los pa¨ªses desarrollados necesitan soluciones educativas para aliviar el paro y el empleo precario, los pobres apuestan, cuando pueden, por la educaci¨®n como motor de desarrollo. Uno de los principales debates educativos se centra actualmente en la financiaci¨®n. Frente a quienes demandan con insistencia m¨¢s fondos, hay expertos que reclaman m¨¢s eficacia en la gesti¨®n econ¨®mica. En todo caso, el reto compartido es hallar nuevas formas de financiaci¨®n.

Expertos de varios pa¨ªses hablar¨¢n esta semana en Madrid sobre La financiaci¨®n de la educaci¨®n, convocados por la XIV Semana Monogr¨¢fica que organiza la Fundaci¨®n Santillana. Ricardo D¨ªez Hochleitner, director del encuentro, subraya la necesidad de encontrar soluciones imaginativas a los retos de la educaci¨®n. ?stos son algunos de los temas que centrar¨¢n las discusiones:- Inversi¨®n educativa. El gasto total de la educaci¨®n en Espa?a superar¨¢ en 1999 los 5,3 billones de pesetas. A los gastos corrientes (sueldos, gesti¨®n y mantenimiento, becas, subvenciones para investigaci¨®n) hay que a?adir las inversiones de capital (construcci¨®n de edificios y su infraestructura, equipamiento, instalaciones). El 80% de estos gastos se financia con dinero p¨²blico. Tan necesario es aclarar prioridades en los gastos como definir los sujetos de la financiaci¨®n. Jaime Terceiro, catedr¨¢tico de Econometr¨ªa en la Complutense, cree que aumentar el gasto en educaci¨®n, prioridad en los pa¨ªses pobres, no siempre es lo mejor en los desarrollados: "Primero hay que reasignar los recursos p¨²blicos. Cuando ¨²nicamente se aumenta el gasto, el resultado es el contrario al deseado y crecen a¨²n m¨¢s las desigualdades".

- Financiaci¨®n p¨²blica y privada. La educaci¨®n p¨²blica se financia sobre todo con los Presupuestos del Estado. Algunos pa¨ªses mantienen impuestos espec¨ªficos para educaci¨®n y empieza a crecer la financiaci¨®n con fondos privados (tasas acad¨¦micas de particulares, empresas, fundaciones). La educaci¨®n privada vive de la matr¨ªcula del alumnado, de fondos de fundaciones y empresas, y de conciertos y subvenciones del Estado. La separaci¨®n entre fondos p¨²blicos y privados es cada vez menor, y no s¨®lo por los conciertos. Algunos expertos piden m¨¢s flexibilidad y menos prejuicios ante las iniciativas privadas.

- Nuevas necesidades. La ense?anza de nuevas tecnolog¨ªas y la necesidad de prolongar la formaci¨®n hasta edades avanzadas -con una esperanza de vida en crecimiento- son inversiones educativas rentables a largo plazo (favorecen el autoempleo y la movilidad laboral), pero mientras tanto son gastos a?adidos. Adem¨¢s se pide apoyar la formaci¨®n profesional, la ense?anza no obligatoria o la educaci¨®n para adultos.

- Propuestas. En enero de 1998, el PSOE present¨® una proposici¨®n de ley de financiaci¨®n educativa que ped¨ªa 600.000 millones en cuatro a?os para todo el pa¨ªs, pero fue rechazada. Al mismo tiempo apareci¨® el Libro Blanco de la educaci¨®n, elaborado por CCOO, que re¨²ne las necesidades en educaci¨®n no universitaria. Se se?ala la necesidad de realizar una inversi¨®n extraordinaria de 966.000 millones en toda Espa?a para solucionar las carencias del sistema educativo: elevado n¨²mero de alumnos por aula en muchos centros p¨²blicos, necesidad de unos 1.200 centros en todo el pa¨ªs y necesaria contrataci¨®n de 57.000 profesores m¨¢s. La Conferencia de Rectores ha pedido reiteradamente un pacto de financiaci¨®n para la educaci¨®n superior.

- Nuevas f¨®rmulas. La dependencia de los fondos p¨²blicos explica, seg¨²n algunos expertos, por qu¨¦ grandes reformas educativas, como la Ley de Ordenaci¨®n General del Sistema Educativo (LOGSE) y la Ley de Reforma Universitaria (LRU), encuentran dificultades financieras para ponerse en marcha. Algunas de las nuevas modalidades que barajan son:

- Ayudas familiares. Las familias espa?olas gastar¨¢n este a?o 1,2 billones de pesetas en la educaci¨®n de sus hijos. En general, el gasto sube al tiempo que asciende el nivel educativo. En algunos pa¨ªses, Espa?a incluida, el periodo m¨¢s costoso es el de la secundaria. Se estudia ayudar a las familias mediante desgravaciones fiscales.

- Tasas universitarias. En Espa?a, cada estudiante cuesta alrededor de 550.000 pesetas anuales. De ellas, 420.000 las pone la Administraci¨®n; 110.000, el alumno, y 20.000 se financian mediante acuerdos con la Administraci¨®n y entidades privadas. El estudiante nunca llegar¨¢ a pagar lo que cuesta su educaci¨®n, pero se pide que al menos sepa lo que recibe. Una posibilidad es que en principio se cobre ¨ªntegramente lo que cuestan los estudios, aunque luego se descuente un porcentaje generoso, seg¨²n los m¨¦ritos acad¨¦micos y la situaci¨®n socioecon¨®mica. En todo caso, hay unanimidad en que el actual modelo de tasas es regresivo, porque no establece ninguna distinci¨®n entre quienes no tienen dificultades para pagar su educaci¨®n y quienes s¨ª las tienen. Tambi¨¦n existe acuerdo en que una subida de las tasas deber¨¢ ir acompa?ada de nuevas ayudas a los estudiantes.

- Becas y pr¨¦stamos. Los expertos coinciden en que, sin un gran incremento de las becas, la implantaci¨®n del distrito ¨²nico es inviable. Por otro lado, hay quien prefiere primar los pr¨¦stamos sobre las becas, o viceversa, aunque en general se cree que son modelos complementarios. Los pr¨¦stamos se plantean como un cr¨¦dito p¨²blico a muy bajo inter¨¦s que el estudiante devuelve cuando empieza a trabajar para que nuevos estudiantes se beneficien. Las becas son, sobre todo, necesarias en los primeros a?os de estudio.

- Fundaciones. Diversos sectores reclaman una ley de fundaciones progresista que favorezca las inversiones privadas en innovaci¨®n, investigaci¨®n y desarrollo. Las ONG son otra forma de captaci¨®n de fondos privados.