'Otello' es un texto eterno sobre racismo y manipulaci¨®n"

Jos¨¦ Cura quiere dejar de ser tan desesperadamente n¨®mada. Por eso, el cantante argentino, de 36 a?os, se estrena estos d¨ªas en Espa?a en todos los sentidos. Primero, porque ha agarrado a su mujer y a sus tres hijos y se ha trasladado con ellos desde Par¨ªs para vivir en Madrid. Y segundo, porque hoy debuta por primera vez en un escenario espa?ol con el Otello que cantar¨¢ en el Teatro Real. El m¨²sico, que, como ¨¦l dice, se gana la vida como tenor pero tambi¨¦n dirige orquestas, ha interpretado repertorio antiguo, domina el viol¨ªn, la guitarra, la flauta, ha formado parte de grupos teatrales y empieza a controlar el mundo del marketing, est¨¢ lanzado.Estos meses, Cura ha disfrutado de un sedentarismo que le ha permitido llevar a sus hijos al colegio, pasar tiempo con ellos altern¨¢ndolo con sus ensayos en el Teatro Real y con alg¨²n recorrido de locos. "El viernes pasado estuve en Londres para promocionar mi disco Verismo, en el que canto y dirijo a la Orquesta Philarmonia; el s¨¢bado, en Weimar, donde me dieron el Premio Eco, que es el Grammy alem¨¢n, por mi Sans¨®n y Dalila; el domingo, en Francfort, donde cant¨¦; el lunes, en Par¨ªs, y el martes, de vuelta a Madrid para el ensayo a tiempo".

Un ritmo de broker de la m¨²sica, lo que es este cantante con futuro, perilla, altura y corpulencia de jugador de rugby noble. "No es que pretenda ser sedentario, pero lo que quiero es no ser tan desesperadamente n¨®mada", afirma ¨¦l, que tiene como objetivo claro en su carrera formar su propia orquesta y quedarse en un lugar fijo. "El ¨¦xito es una nebulosa. Al final, lo que importa es tu familia, la gente cercana, y yo no quiero caer en esas trampas. Prefiero cuidar bien de los m¨ªos".

Matices

Hasta que cumpla su sue?o y se haga m¨¢s due?o de s¨ª mismo, tendr¨¢ que conformarse con ser dirigido por otros. Ahora le toca el turno al maestro L. A. Garc¨ªa Navarro, responsable musical de la Orquesta Sinf¨®nica de Madrid y del coro de dicha formaci¨®n, que debuta hoy con este montaje del Covent Garden, con el que el Real calienta motores para el a?o Verdi, que se celebra en el 2001 y que cuenta tambi¨¦n con Elijah Moshinsky como director de escena. "Es mi cuarto Otello, y de todos he aprendido algo. Ahora, Renato Bruson, que es un legendario bar¨ªtono, me est¨¢ dando matices sobre el personaje que no hab¨ªa visto antes", se?ala Cura.

Lo mismo que se los dio tambi¨¦n Carlos ?lvarez, el bar¨ªtono espa?ol con m¨¢s futuro en el mundo, que tambi¨¦n ha interpretado a Iago junto a Jos¨¦ Cura. "Carlos es de los mejores cantantes que existen hoy, le persigo y le vigilo constantemente porque pienso hacer grandes cosas con ¨¦l en el futuro", avisa Cura. No podr¨¢, en cambio, aprovechar esta vez la compa?¨ªa en escena de la joven soprano de 26 a?os Carla Maria Izzo, que en principio iba a interpretar a Desd¨¦mona, pero que se ha ca¨ªdo del cartel por enfermedad. Ser¨¢ sustituida por la rusa Elena Prokina, que lleg¨® a Madrid el martes para ensayar d¨ªa y noche y poder lucirse en el estreno de esta noche.

A este joven que se est¨¢ convirtiendo en un fen¨®meno de la ¨®pera mundial no le gusta simplificar su Otello como una historia sobre los celos. "No es s¨®lo eso. Es un texto eterno acerca del racismo, los mercenarios, la manipulaci¨®n y el poder", asegura. "Mi visi¨®n del personaje est¨¢ influida por la que han desarrollado los grandes cl¨¢sicos del cine, como Laurence Olivier, Orson Welles y ya m¨¢s recientemente Kenneth Branagh, que dirigi¨® uno con Lawrence Fishburne muy impresionante", dice. "Para m¨ª es un le¨®n herido que va lanzando zarpazos durante toda la representaci¨®n hasta que se destruye. Hoy puede ser un boxeador de clase baja utilizado por su entorno, y algunos artistas pueden verse muy reflejados en ¨¦l, porque a veces somos manipulados para beneficio de otras personas".

El Otello es una de las 30 ¨®peras que Cura tiene de repertorio. "Poco a poco voy formando mi estilo hasta que encuentre esos 15 o 20 t¨ªtulos donde me pueda expresar lo mejor posible", asegura. Por ahora est¨¢n entre Verdi, del que ya est¨¢ preparando un disco de homenaje para el a?o que viene; Puccini y los dem¨¢s representantes del verismo, entre los que luce Mascagni y su Cavalleria rusticana, uno de los t¨ªtulos que m¨¢s gloria le ha dado.