Lidia Jorge subraya el sentido dram¨¢tico de las letras portuguesas

"Nuestra relaci¨®n con el mundo es diferente. Los portugueses fuimos los primeros en colonizar ?frica y tambi¨¦n los ¨²ltimos en marcharnos y es un problema que vivimos de forma especial y aguda por toda Europa y que explica el sentido algo dram¨¢tico de Portugal. Y esto tambi¨¦n ha creado una forma de narrar, que es escribir con la memoria pr¨®xima de nuestra Historia, que se confunde con toda Europa", opina la escritora portuguesa Lidia Jorge, que ha participado esta semana en el ciclo Escritoras fin de siglo, organizado por el C¨ªrculo de Bellas Artes, de Madrid.La autora de La costa de los murmullos (Alfaguara), considerada una de las escritoras portuguesas m¨¢s relevantes del ¨²ltimo cuarto de siglo, opina que pa¨ªses como Francia, el Reino Unido y Espa?a, han tenido formas "m¨¢s inteligentes" de abandonar sus colonias, quiz¨¢, a juicio de Lidia Jorge, "como forma de implantar el neocolonialismo".

Una situaci¨®n econ¨®mica portuguesa, inferior al resto de los pa¨ªses europeos, tambi¨¦n ha afectado a la escritura de los autores lusos, seg¨²n explica Jorge: "La novela espa?ola es m¨¢s urbana y sin embargo es m¨¢s cosmopolita la portuguesa, quiz¨¢ porque no tenemos las tensiones nacionalistas que se producen en algunas autonom¨ªas. No quiero decir que la novela espa?ola sea provinciana, s¨®lo que nosotros escribimos con menos ideolog¨ªa. Los escritores portugueses que leo, como Lobo Antunez y Saramago, tienen una ligaz¨®n muy fuerte con el exterior y sus temas afectan a toda la humanidad", defendi¨® la escritora. En todo caso, a?adi¨®, "los escritores portugueses tendr¨ªamos m¨¢s ¨¦xito en el exterior si hici¨¦ramos una literatura menos l¨ªrica y m¨¢s narrativa, que contara acci¨®n".

Acerca de su literatura, la escritora dijo que en sus primeros libros apost¨® por mezclar todos los elementos para no triunfar ("felizmente pas¨® lo contrario"): nostalgia y localismo, escrito en lenguaje jur¨ªdico. Ahora dice que su escritura ha iniciado un nuevo rumbo, menos fant¨¢stico y m¨¢s pegado a la realidad.