El mejor golfista desconocido
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A d¨ªa de hoy mismo, a dos de noviembre de 1999, Espa?a cuenta con tres golfistas entre los 30 mejores del r¨¢nking mundial. Sergio Garc¨ªa, el fen¨®meno, es 15?; Jos¨¦ Mar¨ªa Olaz¨¢bal, el discreto ganador de dos Masters de Augusta, es 25?, y Miguel ?ngel Jim¨¦nez es 27?. ?Qui¨¦n dice usted que es el 27?? Miguel ?ngel Jim¨¦nez. ?Ah! ?Y? El mejor golfista desconocido, le llaman los norteamericanos, y no hacen ning¨²n esfuerzo para conocerlo mejor. "El mec¨¢nico", le dicen los ingleses. Y siguen: tiene un Ferrari, pero vi¨¦ndole las pintas, la cara trabajada, las arrugas de campesino viejo, el bigote que parece tirar de su labio hacia abajo, la gorra dos tallas peque?a, sus andares, su swing sui g¨¦neris, m¨¢s parece salido de debajo del cap¨®, negro de grasa, que del asiento de due?o. ?l, Miguel ?ngel Jim¨¦nez, el Pisha de Churriana, el 27? golfista del mundo, s¨¦ptimo de Europa, tercero de Espa?a y ganador el domingo del Volvo Masters, les llama a todos guiris. Y su hijo, Miguelito, proyecto de golfista de casi cinco a?os, le tira de la manga y le dice: "Papapisha, antes no ganabas tanto como ahora".Jim¨¦nez tiene ahora 35 a?os, un Ferrari rojo, unas cuantas victorias en el circuito del golf, dos hijos y un chalet adosado en Benalm¨¢dena, pero hace 20 a?os ten¨ªa dos manos y muchas necesidades. Viv¨ªa en Churriana, a dos pasos del aeropuerto de M¨¢laga, al lado del campo de golf del Parador. "Mi padre era alba?il y yo el quinto de siete hermanos. A los 15 a?os dej¨¦ la escuela y para ganarme unas pesetas me fui de caddie al club de Torrequebrada, donde mi hermano Juanito El Pecas trabajaba de profesional. Pero trabaj¨¦ poco de caddie. Fui m¨¢s bien bolero en el campo de pr¨¢cticas y ayudante de mi hermano. Y jugaba mucho al golf".
Amor por Seve
Aquel a?o en que Jim¨¦nez era una ni?o de 15 a?os que empezaba a jugar al golf para ganarse la vida era 1979, el a?o en que Severiano Ballesteros gan¨® su primer Open Brit¨¢nico. "Fue un boom. Empec¨¦ a leer en las revistas del club lo que era la competici¨®n. Empec¨¦ a tener ilusiones deportivas. Ya no so?aba con ser un profesional como mi hermano y ganarme bien la vida ense?ando a los se?oritos a jugar al golf. Cambiaron las perspectivas. So?¨¦ con ser un campe¨®n del deporte". Se enamor¨® de Ballesteros, otro como ¨¦l, un poco m¨¢s viejo, salido de la antigua l¨ªnea caddie-jugador. "Como ya no hay caddies, todos los jugadores salen de los amateurs o de las escuelas". Ballesteros es su h¨¦roe. Ballesteros le hace vicecapit¨¢n europeo en la Ryder de 1997. Ballesteros cree en ¨¦l. Jim¨¦nez le adora.Jim¨¦nez tambi¨¦n cree en ¨¦l mismo. Jim¨¦nez se ve ganador nato. "Hace dos a?os, dudaba. Pero ahora claro que me veo con posibilidades y juego para ganar un grande". Pero antes, desde este jueves mismo, el American Express, el torneo del mill¨®n de d¨®lares, aunque entre los rivales est¨¦n nada menos que los mejores del mundo, est¨¦ Tiger Woods y est¨¦ Sergio Garc¨ªa, El Ni?o. "El golf no se acaba en ellos. Yo tambi¨¦n gan¨¦ la Copa Dunhill, no s¨®lo El Ni?o. Y yo tambi¨¦n estuve en la Ryder Cup". ?l, el Pisha, y sus andares peculiares, y su cigarrillo ceg¨¢ndole los ojos cuando en el campo de pr¨¢ctica lo deja en las comisuras mientras agarra los hierros y suelta su l¨¢tigo, su swing, ten¨ªa un sue?o: hacerse millonario para comprarse un Ferrari rojo. Ya lo tiene. Ya no piensa tanto en el dinero. "El dinero", dice, "es algo que te ayuda a vivir, pero no es la base de la vida, lo importante es la familia".
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