De las distintas caras del gobierno del PP

A fecha de escribir esta opini¨®n (30-10-99) UGT, el sindicato del que soy secretario general, todav¨ªa no ha tenido oportunidad de conocer el proyecto de Presupuestos de la Generalitat para el pr¨®ximo a?o, ya que no hemos sido consultados en nada para su elaboraci¨®n habiendo tantas cosas de trascendencia para los trabajadoras y trabajadores valencianos.Mucho me temo que este sea un nuevo ejemplo de la mofa a la que el Gobierno auton¨®mico nos tiene acostumbrados cuando, por un lado, predica y exalta la normalidad del "di¨¢logo social" con los agentes sociales y, por otro, ese di¨¢logo social no implica nunca concertaci¨®n ni compromiso.

Se trata de las distintas caras del Gobierno auton¨®mico del PP que, en un laborioso, costoso y obsesivo despliegue propagand¨ªstico, medi¨¢tico, de imagen en definitiva, hace del di¨¢logo social un fin en s¨ª mismo pero a quien bien poco le importa que todo quede en agua de borrajas porque la proyecci¨®n ha sido conseguida.

La UGT-PV hace ya tiempo que viene denunciando esta especie de argucia que no es otra cosa que la tomadura de pelo a todos los ciudadanos y trabajadores de la Comunidad Valenciana.

La permanente utilizaci¨®n y entronizaci¨®n del di¨¢logo social hurtando la posibilidad de opinar y debatir previamente y encontrarse las cosas (los Presupuestos del 2000) hechas y decididas, supone una falta de ¨¦tica y un modo de proceder propio de la cara oculta de este Gobierno, que, l¨®gicamente, no es la que presentan al gran p¨²blico, de "pasajeros al centro con hora aproximada de llegada".

Voy a referirme a los ¨²ltimos acontecimientos que describen bien este paisaje pol¨ªtico de burla al di¨¢logo social.

En el mes de septiembre la UGT-PV present¨® al Gobierno de la Generalitat Valenciana una serie de propuestas que consideramos fundamentales en relaci¨®n con las necesidades que, a nuestro modo de ver, deb¨ªa contemplar el PDR (Plan de Desarrollo Regional 2000-2006) que el Gobierno valenciano hab¨ªa de remitir al Gobierno central para que este ¨²ltimo lo presentara, junto con el del resto de comunidades aut¨®nomas, a Bruselas antes del 1 de noviembre, para que la Uni¨®n Europea asignase los fondos para los planes operativos a desarrollar finalmente en cada territorio. Esta es la fecha en que no sabemos absolutamente nada acerca de si nuestras propuestas fueron atendidas o simplemente cayeron en saco roto. Eso s¨ª, previamente a todo esto y hasta la presentaci¨®n de las propuestas, con fecha tope habilitada al efecto, se celebr¨® la pertinente reuni¨®n, se proyect¨® el "di¨¢logo social", se proyect¨® profusamente a la opini¨®n p¨²blica, etc, etc.

Tambi¨¦n desconocemos a estas alturas qu¨¦ es lo que este Gobierno auton¨®mico quiere hacer de la sanidad y la educaci¨®n p¨²blica con concreci¨®n en los pr¨®ximos Presupuestos, o -por mejor decir- mucho tendr¨ªa que equivocarme si lo que van a hacer o van a seguir haciendo ser¨¢ continuar con el desmembramiento y desmantelamiento de esos dos pilares b¨¢sicos del Estado del Bienestar que tantos esfuerzos y tantos desvelos han comportado, entre otros, a la Uni¨®n General de Trabajadores en beneficio siempre de los trabajadores y trabajadoras.

No hay que ser muy lince sino simplemente un mero observador de la realidad para darnos cuenta de que frente a una sanidad p¨²blica de calidad se viene insistiendo en mensajes de f¨®rmulas de gesti¨®n mixtas, privadas, privatizadas y fundaciones sanitarias porque dicen que no hay dinero para todos. Sin duda, es acu?ar por la v¨ªa de los hechos -en muchos casos ya- la Sanidad de caridad como hace ya mucho tiempo que no se ve¨ªa.

Otro tanto ocurre con la educaci¨®n p¨²blica, gratuita y universal que ve c¨®mo encaja cont¨ªnuos reveses v¨ªa conciertos educativos con colegios privados, dejando lo p¨²blico al pairo o, lo que es lo mismo, dej¨¢ndolo a la suerte de quien tenga o no tenga dinero para optar a una educaci¨®n que nuevo cu?o "la de los ricos", con complicidad del Gobierno, frente a "la de los pobres o de la caridad".

Son estos algunos ejemplos que corroboran las distintas caras de este Gobierno del PP, del Gobierno de viva el di¨¢logo social fatuo, frente a los que la UGT-PV se rebela; mientras tanto nos queda la palabra y la pluma, entre otras muchas cosas.

Rafael Recuenco Montero es secretario general de UGT-PV.