Los gallegos toman la Liga

Instalado el Barcelona en su c¨ªclico mes ruinoso, ese tradicional noviembre en el que se le acumulan todas las desgracias (tres derrotas consecutivas llevan ya los azulgrana), atrapado el Madrid en su crisis galopante, escondidos en la zona media baja los equipos que se cuelgan la condici¨®n de alternativas (Atl¨¦tico, Athletic, Valencia, Betis...) y de-sinflado el Rayo en Soria, los equipos gallegos se decidieron ayer a tomar la Liga. Y lo hicieron a lo grande, especialmente el Deportivo, que contest¨® a todos los contratiempos del partido (un penalti en contra, un gol en seco de Moya) con una exhibici¨®n. Djalminha arroj¨® sobre Riazor de una sola tacada buena parte de los mejores pasajes de este campeonato: un golazo de falta para el empate, un pase con el exterior del pie mirando hacia otro lado que anunci¨® el 3-1, un regate de cola de vaca... El Deportivo se gust¨®, construy¨® un partidazo y dej¨® al Sevilla en el pozo de la tabla.El Celta es col¨ªder, ya que su balance de goles es inferior al del Deportivo. Entendi¨® que Zorrilla es uno de esos campos donde se conquistan las Ligas y supo ganar. Tard¨® en acomodarse el partido, pero en cuanto Mostovoi y Karpin se decidieron a entrar en escena, el Valladolid se desplom¨®. La cita concluy¨® en 1-3 y con gol de McCarthy, que apag¨® as¨ª el fuego de impaciencia que empezaba a notar alrededor.

Los conjuntos gallegos se aprovecharon de los tropiezos de quienes les preced¨ªan en la tabla. Al Rayo, anterior l¨ªder, le falt¨® oficio para hacer valer el gol de Canabal y acab¨® doblegado ante el Numancia (3-1). Y el Zaragoza, que era segundo, se dej¨® fulminar por el Betis (2-0, goles de Finidi).

Quien no sale de la crisis el Madrid. Al menos, no la abandona en lo que a resultados se refiere. La Real, con un cabezazo en un c¨®rner como todo bagaje ofensivo, consigui¨® arrancar un empate del Bernab¨¦u. Pero el equipo, dirigido desde el banquillo por el interino Vicente Del Bosque, demostr¨® progresos. Durante 75 minutos jug¨® con m¨¢s claridad y determinaci¨®n que ¨²ltimamente, d¨¢ndole prioridad a la pelota. Algunos de sus futbolistas se esforzaron por brillar, como Savio y Seedorf, ambos convertidos en permanentes quebraderos de cabeza de la Real. De una jugada del holand¨¦s sali¨® el gol del brasile?o con el que los blancos creyeron cerrar su partido. Pero fue a partir del 1-0 cuando al Madrid le entraron los temblores. Quiso proteger su ventaja y no supo. Pikabea acert¨® a marcar de cabeza y dej¨® el primer d¨ªa sin Toshack en empate.