"El Jard¨ªn es un puente entre ciencia y cultura en Madrid"
Mar¨ªa Teresa Teller¨ªa, nacida en Bilbao en 1950, dirige desde hace cinco a?os el Jard¨ªn Bot¨¢nico de Madrid, una de las instituciones de la ciudad m¨¢s cargadas de historia. Doctora en Farmacia y especialista en hongos, con un palmar¨¦s universitario dedicado a la ciencia y su ense?anza, rige este vergel creado dos siglos atr¨¢s por Carlos III con una vocaci¨®n de entrega a su pasi¨®n por el conocimiento y su divulgaci¨®n. Un centenar de hombres y mujeres de ciencia, adem¨¢s de administrativos, empleados y expertos, trabaja a sus ¨®rdenes, que a su vez ella recibe del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas. Una veintena de jardineros, tambi¨¦n bajo su mando, han de hab¨¦rselas cada d¨ªa del a?o con un recinto cuya historicidad y delicadeza ci?e los cuidados del jard¨ªn al empleo, casi inalterado, de los mismos utensilios usados en ¨¦l desde el siglo XVIII, en el que fuera fundado. Con un presupuesto de unos 120 millones de pesetas anuales, excluida la n¨®mina, Teller¨ªa ha situado al Jard¨ªn Bot¨¢nico entre los principales centros generadores y divulgadores de ciencia y cultura en Madrid. "Tal ha sido el prop¨®sito de mi mandato", dice con una sonrisa.Pregunta. ?Qu¨¦ tesoros antiguos alberga el Jard¨ªn Bot¨¢nico?
Respuesta. Los tesoros que guarda son de dos tipos. Primero, los que se ven en sus ocho hect¨¢reas de extensi¨®n sobre el coraz¨®n del Madrid de los Borbones: unas cinco mil especies distribuidas en sus terrazas neocl¨¢sicas y rom¨¢nticas; sus fuentes y puertas obra de Sabatini y de Villanueva. Y los tesoros que no se ven, guardados celosamente en sus archivos, su biblioteca y su herbario.
P. ?Plantea alg¨²n tipo de problemas la visita de gran cantidad de personas a un jard¨ªn hist¨®rico como ¨¦ste?
R. El precio simb¨®lico de la entrada, doscientas pesetas, asegura el inter¨¦s de casi todos los que a ¨¦l acceden. Es algo as¨ª como una medida disuasoria. Pero lo cierto es que, pese a que los fines de semana puede ser visitado por m¨¢s de 4.000 personas, el respeto que muestran es todo un ejemplo del civismo de esta ciudad. Apenas dejan huella.
P. ?Qu¨¦ papel juega el Jard¨ªn Bot¨¢nico en la vida cient¨ªfica y cultural de Madrid?
R. Es precisamente el puente s¨®lido entre una y otra. En su seno tienen lugar conferencias de divulgaci¨®n bot¨¢nica y medioambiental, exposiciones, visitas did¨¢cticas y todo un abanico de actividades y cert¨¢menes orientados al p¨²blico. Es una instituci¨®n cient¨ªfica dotada de las herramientas necesarias para su transformaci¨®n en cultura.
P. ?Reservan alg¨²n papel a la ecolog¨ªa?
R. La ecolog¨ªa es una ciencia a¨²n muy joven. Otros centros del CSIC se dedican m¨¢s espec¨ªficamente a ella. Aqu¨ª, la taxonom¨ªa, la clasificaci¨®n bot¨¢nica y la flor¨ªstica son los dos instrumentos que permiten descubrir la fascinaci¨®n de la biodiversidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.