Arzalluz dice que el PNV saldr¨¢ a la calle si EH no se despega de la violencia

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, advirti¨® ayer al mundo de HB de que, si no se "despega claramente" de la violencia callejera, el PNV "va a empezar a salir a la calle a cuenta de la kale borroka". Pero Arzalluz dirigi¨® a los socialistas la sugerencia de mayor calado pol¨ªtico al indicar que tras la entrevista con su l¨ªder, Joaqu¨ªn Almunia, cree que ¨¦stos van a buscar su camino en el proceso de paz al margen del PP. En las ant¨ªpodas, el l¨ªder de EH, Arnaldo Otegi, cree que la alternancia en La Moncloa no resolver¨¢ por s¨ª sola el caso vasco.

Como es habitual en Arzalluz a su vuelta de Madrid tras un encuentro de alto nivel pol¨ªtico, el dirigente nacionalista explic¨® los entresijos de su almuerzo-entrevista con Almunia, esta vez en Euskal Telebista, la televisi¨®n p¨²blica vasca.Se mostr¨® abiertamente contundente con el "inmovilismo" del presidente del Gobierno, a quien acus¨® de estar cautivo del coste electoral que supone un movimiento audaz en el proceso de paz. "Aznar no puede presumir de haber dado ni un solo paso para solucionar esto", recrimin¨®. Y al recordarle que ETA lleva casi a?o y medio sin asesinar o secuestrar, se pregunt¨®: "?Pero este se?or qu¨¦ necesita para ver que le toca intervenir en el proceso de paz?".

El presidente del PNV aventur¨® que el Ejecutivo realizar¨¢ alg¨²n movimiento en pol¨ªtica penitenciaria antes de Navidad, porque, seg¨²n Arzalluz, "el inmovilismo del que se le acusa est¨¢ empezando a suponer un peligro electoral para el PP". El l¨ªder peneuvista augur¨® que el PSOE tiene intenci¨®n de "pinchar" al Gobierno para que "haga algo" en materia de acercamiento de presos de ETA.

La clave est¨¢ de nuevo, a juicio de Arzalluz, en el proceso electoral de marzo -"de aqu¨ª en adelante no hay m¨¢s que elecciones"-, m¨¢xime cuando los dos grandes partidos tienen posibilidades de acceder a La Moncloa, pero para gobernar en minor¨ªa. Y sea Aznar o Almunia el pr¨®ximo presidente, el veterano dirigente nacionalista les record¨® a ambos lo que encontrar¨¢n cuando llamen a la puerta del PNV para conseguir la tan ansiada mayor¨ªa suficiente: "[Los peneuvistas] pondr¨¢n encima de la mesa lo que es el problema de primer orden para nosotros: el proceso de paz, tema que est¨¢ paralizado para ambos partidos".

A juicio de Arzalluz, el PSOE parece querer hacerse un sitio propio en el proceso de paz, sin llegar a entrar en Lizarra, pero alej¨¢ndose cada vez m¨¢s de las posturas "inmovilistas" del PP. "Almunia dijo que apoyaban la pol¨ªtica institucional aunque el Gobierno no se dejaba apoyar. Es una frase muy bien pensada". Para el l¨ªder peneuvista, ello quiere decir que los socialistas tendr¨¢n que ir buscando su propio camino. Y el PNV est¨¢ dispuesto a estudiar "muy seriamente" f¨®rmulas para hacer un sitio al PSE sin que tenga que pasar por el aro de Lizarra.

Movimientos en el socialismo

Lo cierto es que esa interpretaci¨®n llega en un momento en el que los socialistas guipuzcoanos, liderados por Jes¨²s Eguiguren y Manuel Huertas, quieren dar un giro vasquista al partido, al tiempo que defienden la necesidad de que todos los partidos se sienten en un foro de di¨¢logo sin exclusiones, justo lo que busca el lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, y a lo que se niega el PP. Este ¨²ltimo planteamiento no cuenta con el benepl¨¢cito del secretario general del PSE-EE, Nicol¨¢s Redondo, que ha matizado p¨²blicamente las palabras de Huertas. Redondo reiter¨® ayer que la "lealtad" del PSOE con el Gobierno en esta materia es "inalterable", y se mostr¨® convencido de que los partidos que firmaron el Acuerdo de Lizarra, salvo HB, est¨¢n "en una profunda crisis" y que entre el PNV y HB "cada vez hay menos espacio pol¨ªtico".La entrevista con el presidente del PNV se produjo horas despu¨¦s de otro suceso de kale borroka, esta vez en Hernani (Guip¨²zcoa), con la quema de dos cajeros autom¨¢ticos. Y como si estuviera a un paso de perder la paciencia -"porque todos los d¨ªas hay algo"-, Arzalluz pidi¨® expresamente a HB que supere "de verdad determinadas cuestiones" de violencia. "Nosotros tenemos que romper [con HB] o empezar a condenar nosotros y ¨¦so es lo que vamos a empezar. El PNV, si estos no se despegan claramente o no terminan con eso, va a empezar a salir a la calle a cuenta de la kale borroka". Insisti¨® en que para su partido "la construcci¨®n nacional es nuestra raz¨®n de ser", pero tambi¨¦n subray¨® que "sin paz, no hay construcci¨®n nacional".

Frente a este escenario de t¨ªmidos movimientos y reproches mutuos de inmovilismo, el l¨ªder de HB, Arnaldo Otegi, volvi¨® a situar la resoluci¨®n del problema vasco en Euskadi y Navarra. En ese sentido, critic¨® a los que pretenden "desnaturalizar" el proceso abierto en Euskadi tras la tregua de ETA con las c¨¢balas sobre qui¨¦n ocupar¨¢ La Moncloa tras los comicios generales. Otegi dijo que "la clave de Madrid no se cambia ni con comidas ni con cenas", en alusi¨®n al encuentro Almunia-Arzalluz. Otegi "no quiere jugar a la loter¨ªa en Madrid", sino a "la realidad vasca", porque "el problema no es qui¨¦n gestiona los Estados espa?ol y franc¨¦s, sino que esos Estados no son capaces de abordar en claves democr¨¢ticas la resoluci¨®n del conflicto".

Lo que para Arzalluz son movimientos en el socialismo, Otegi lo interpreta como espejismos preocupantes ya que al "PNV se le enciende una bombilla pensando que el PSOE va a ser capaz de dar un viraje en sus posiciones pol¨ªticas y arbitrar medidas de corte democr¨¢tico para resolver el conflicto". El l¨ªder independentista vasco a?adi¨® que "el problema no es la kale borroka, sino poner el proceso en otro ritmo".